En este escenario de intercambio de experiencias, los participantes trataron de encontrar soluciones adecuadas para iluminar el camino de los pueblos de la región y analizar “los desafíos y orientaciones desde la Iglesia”, para fortalecer el sistema democrático, la participación ciudadana, y la formación y el compromiso de los creyentes en la vida pública en los diversos países. Sin olvidar a los movimientos sociales, que han adquirido una calidad dogmática, y “nadie puede decir si están completos o incompletos”, recordó el también presidente de dicho departamento, al tiempo que invitó a “mantenerse vigilantes para poder ver el paso del Señor en medio de nuestros pueblos de América Latina y El Caribe”.
Divididos en grupos, los asistentes consideraron los retos que se le presentan a “la acción profética de la Iglesia” y brindaron un “Marco de Referencia desde la Doctrina Social de la Iglesia” con el que analizar la situación actual y las perspectivas de la democracia en el continente.
Diálogo para Bolivia
El cardenal Terrazas se refirió también a los comicios presidenciales del día 6 en su país, aunque considera necesario que pase la euforia del resultado electoral para que Iglesia y Gobierno puedan sentarse a dialogar con tranquilidad. Y si bien admitió que en el discurso del Ejecutivo hubo numerosos adjetivos contra la Iglesia, anunció que ésta continuará respondiendo con respeto y silencio.
A juicio de Guillermo León Escobar, consultor pontificio, la Iglesia en Bolivia ha pasado por momentos difíciles en los últimos años, a causa sobre todo de la falta de una apertura al diálogo por parte de los gobernantes y de su decisión única de mandar. En su mirada a la realidad boliviana, el que fuera embajador de Colombia ante la Santa Sede sostuvo que la Iglesia debe continuar defendiendo los valores de la vida, la verdad y el bien común, y esto se debe tratar de hacer en armonía con todos los sectores sociales.
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En el nº 2.688 de Vida Nueva.