En el transcurso de su homilía, el hasta hace poco obispo de Ourense se hizo eco de las palabras de Benedicto XVI a los católicos de Irlanda llamando a “renovar la adhesión de las personas a las enseñanzas y valores católicos”, algo imprescindible en medio de los veloces cambios sociales. Para ello, invitó a implicarse en acontecimientos eclesiales tan relevantes como el Año Santo Jacobeo, el Año Sacerdotal y la JMJ.
En cuanto a esta última cita, pidió redoblar esfuerzos pastorales para anunciar el Evangelio, pues, “si nuestros jóvenes se dejan ganar por Jesucristo, serán el motor incansable de la renovación diocesana”.
“Deseamos ser una Iglesia rejuvenecida por el Espíritu Santo en el corazón de una sociedad esencialmente dinámica, viviendo sin condiciones la apuesta por la caridad y asumiendo sin reservas la entrega a los necesitados”, afirmó.
Y con la vista puesta en el futuro, Quinteiro llamó a “mirar hacia delante confiando en la palabra de Cristo”: “Nada puede justificar entre nosotros una sensación de dejadez y menos aún una actitud de desinterés”.
En el nº 2.705 de Vida Nueva.