JUAN RUBIO, Director de Vida Nueva | No es fácil sumar esfuerzos y navegar por las procelosas y, a veces, convulsas aguas de los digitales de información religiosa. Un día hablaremos de ello, pero hoy quiero poner acento en la página www.catalunyareligio.cat. Una iniciativa abierta, eclesial, plural, poco estridente y propositiva. No se ha entregado ni al ditirambo ni al atropello.
Cuidan la lengua de Verdaguer y lo hacen con el aire de Maragall, y no tienen empacho en sacar textos en castellano. Bilingüismo inteligente. Cuando se ven los soportes, uno piensa que es posible la convergencia y que es posible abrir un espacio en el que la noticia, el comentario y el análisis no tengan que estar entre escombros malolientes de comentarios anónimos que hurgan la pupa, como sucede con otros espacios catalanes que han puesto en solfa, desde el lado ultramontano, a todo ser que no germine a su lado.
No he visto en ninguna de sus informaciones cosa que hiera la comunión eclesial. Hay a quienes les molesta el estilo sereno y abierto. Lo está logrando esta ventana abierta, desde una tierra que tiene todo el derecho del mundo a hablar su lengua. Lo extraño es que moleste que se hable de Dios en catalán. ¿Qué tiene de malo?
En el nº 2.769 de Vida Nueva.
