Una obra de Carmina Gómez (Ed.) (Narcea, 2012). La recensión es de J. Fandiño.
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El compromiso que nace de la fe
Editora: Carmina Gómez
Editorial: Narcea, 2012
Ciudad: Madrid
Páginas: 137
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J. FANDIÑO | Esta pequeña pero intensa obra es testimonio y experiencia del auténtico diálogo interreligioso. Atiende a la máxima de promover lo que une en vez de lo que separa. Y, como experiencia y testimonio, puede ayudar a la reflexión, al trabajo en grupo y a la promoción de espacios de encuentro. De hecho, urge abordar el pluralismo religioso y nuestra manera de asumirlo en las sociedades actuales.
Lo explica muy bien en el prólogo Antoni Matabosch, director del Institut Superior de Ciències Religioses de Barcelona: “Hoy ya no podemos vivir el cristianismo alejados de las otras tradiciones religiosas. El pluralismo religioso ha crecido extraordinariamente en nuestras sociedades. No solo ha cambiado el panorama religioso, sino que nos hemos dado cuenta de que no podemos vivir unos de espaldas a otros”.
La propuesta que nos hacen los autores que aquí colaboran se enmarca en los tiempos más importantes del Año Litúrgico: Adviento-Navidad, Cuaresma-Pascua y, más en concreto, el Triduo Pascual. Y durante estos tres momentos, y tras una reflexión, aparece la experiencia de un musulmán y de un judío.
Cada capítulo se completa con una película comentada por Peio Sánchez y que puede ayudar, de una manera más gráfica y sencilla, a profundizar en el tema.
En suma, este libro es un acercamiento a las religiones abrahámicas desde un punto de vista espiritual y sencillo, al alcance de todos y para todos. Textos así ayudan a los creyentes de las diversas religiones a verse como hermanos. Estamos condenados a entendernos, y en la medida que lo logremos, nuestro testimonio será más creíble.
En el nº 2.798 de Vida Nueva.
