Editora de ‘Pensamientos de San Francisco de Asís’ (San Pablo)
J. L. CELADA | Doctora en Periodismo por la Universidad Complutense, la editora y crítica literaria Isabel Martínez Moreno es también autora de varios libros. Entre ellos figuran Antonio Gala. El paraíso perdido o La llaga de amor viva, sobre Francisco de Asís. A este último dedica los Pensamientos de San Francisco de Asís, que acaba de editar para San Pablo.
– ¿Qué novedad aportan estos Pensamientos a la figura del santo más popular y biografiado del santoral?
– La novedad está en la estructura del libro; en ofrecer la espiritualidad de Francisco a través de referentes fundamentales que definen su identidad como hombre de Dios, identificado con Jesucristo.
– ¿Qué criterio ha seguido en su selección?
– El mismo que guía al labrador ante la cosecha: recolectar con mimo su siembra. Con una salvedad: que el mérito y los frutos son de Francisco. Mío es solo el trabajo de agrupar el contenido de sus Escritos y de su vida en sugerentes haces para que el lector pueda tener una visión directa de la espiritualidad de este gran hombre. 
– La verdadera alegría, el Cántico de las Criaturas, su espíritu pobre y fraterno… ¿Destacaría algún otro aspecto de Francisco de Asís menos conocido pero fundamental para entender su trascendencia a lo largo de los siglos?
– Su apuesta por la Creación. La Naturaleza es para él ámbito sagrado donde descubre el Rostro de Dios. Francisco se siente hermano y solidario con todos y con todo lo creado. Un aspecto de gran actualidad ante la urgencia de cuidar el medio ambiente. También, haber convertido su historia consagrada en una búsqueda de la identificación total con Cristo.
– ¿Cómo aconseja leer/meditar este libro?
– Una vez le preguntaron a Antonio Gala con qué personaje histórico le gustaría cenar. Contestó que con Francisco de Asís, aunque hubieran comido un trozo de pan. El lector puede acercarse al libro como quien queda a cenar con un amigo, en este caso con Francisco. A lo largo de la cena, podrá conocer de primera mano su opinión sobre los temas nucleares de su espiritualidad: pobreza, amor, fraternidad, muerte, creación… Podría ser una metodología. Pero la mejor manera de acercarse a los Pensamientos es con la voluntad de aprender de quien es paradigma de oración y seguidor de Jesús. Para quienes se acerquen por primera vez a la obra de Francisco, pienso que leerlo ordenadamente puede ofrecerles una imagen certera de su identidad. Para quienes lo conozcan, este texto puede ayudar a profundizar en él, al ofrecer desgranados los aspectos esenciales de su legado espiritual.
– Francisco hizo de su vida (y su muerte) entera una oración de alabanza. ¿Cómo puede iluminarnos su ejemplo en estos tiempos más propicios a la súplica?
– En Francisco se personifica la excelencia del amor y la gratitud a Dios. Y, por ello, es arquetipo del hombre bendecido. De él aprendemos cómo la alabanza, el despojamiento y el abandono en Dios son las únicas vías para alcanzar la esencialidad del ser. Él nos enseña que la vida es una empresa ilusionante si se aborda con un corazón entregado; cuando se vive desde la certeza de que el Sumo Bien es la fuente de la verdadera libertad; también, la clave para vivir dichosos en armonía con nosotros mismos y con el mundo. La alabanza, a diferencia de la súplica, es el signo más claro de la persona que es alter Cristus, como lo procuró Francisco. La alabanza habla de las criaturas que viven en Dios y en Él encuentran su alegría: su única y verdadera alegría.
En el nº 2.817 de Vida Nueva.
