Entrevista con el director de Ediciones Khaf
J. L. CELADA | Juan Pedro Castellano (Vitoria, 1970), licenciado en Catequética y en Ciencias Religiosas, es el director de Ediciones Khaf. Desde su vocación misionera –que ha desempeñado por tierras latinoamericanas–, su vida laboral está vinculada actualmente al mundo educativo a través de la docencia y la edición.
PREGUNTA.- Tras casi cuatro años de andadura, ¿está satisfecho con el lugar que ocupa hoy Khaf en el mercado del libro religioso?
RESPUESTA.- Somos de los últimos en llegar, pero hemos conseguido que lectores y libreros reconozcan nuestros títulos. Estamos satisfechos con el camino recorrido. Hemos hecho realidad lo que era un sueño del Grupo Editorial y de los HH. Maristas. Distintos autores de renombre en el mundo religioso han confiado en nosotros. En las librerías, nuestros títulos se han hecho un lugar, y los lectores nos reconocen y agradecen el cuidado por la edición y los títulos que ofrecemos. No obstante, quedan retos que afrontar: mejorar el lugar del libro religioso en la librería generalista, agilizar la distribución o definir nuestra presencia en el ámbito digital.
P.- Entre sus señas de identidad, figura el empeño por aunar el rigor y la divulgación. ¿Cómo se logra eso?
R.- Es un empeño que nos ocupa cada día. Para conseguirlo, es necesario dialogar mucho con los autores, poner el oído en la calle y escuchar lo que demandan los lectores, los libreros y las instituciones. Igualmente, es importante cuidar la imagen y edición de nuestros libros, que sean publicaciones frescas, modernas, amables, que huyan de ciertos estereotipos ligados a las publicaciones de tipo religioso.
P.- Otro de los lemas de su sello editorial habla de “leer para crecer”… y “para creer”, podría añadirse. ¿Se cree menos porque se lee menos?
R.- La respuesta es compleja, porque influyen muchos factores. La lectura ayuda a comprender mejor nuestra fe, a reconocerla como algo racional y a descubrir nuevas perspectivas. Leer supone abrirse al otro, y esa apertura es fundamental a la hora de creer. Deberíamos promover más este tipo de lecturas en nuestros grupos e instituciones como un ámbito de encuentro y un camino para profundizar.
P.- ¿Qué acogida están teniendo entre el público?
R.- El número de nuestros lectores sigue en aumento. Algunos de nuestros títulos (La lógica del don, Jesús en Roma…) han sido bien acogidos y hemos tenido que reimprimir en varias ocasiones. En general, las reseñas que nos llegan son positivas y la imagen de nuestros títulos es muy valorada. Interactuamos mucho con nuestros lectores a través de las redes sociales. Es una forma privilegiada de comunicación y de conocer opiniones sobre nuestros libros, intereses y valoraciones de lo que hacemos. Un elemento que destacan es la apertura de nuestro catálogo a distintas sensibilidades eclesiales. Cuesta abrirse un sitio entre el lector no especializado, pero es uno de los retos que queremos afrontar.
P.- ¿Puede desvelarnos algunos de los proyectos que tienen entre manos?
R.- En los próximos títulos ahondamos en el diálogo entre la fe y la cultura actual, tanto en el ámbito de reflexión (más cercano a la filosofía) como en el ámbito pastoral. Nos abrimos a otras realidades que tienen mucho que enseñarnos y seguimos apostando por novelas que nos acerquen a los grandes hitos de la fe cristiana.
En el nº 2.854 de Vida Nueva.