ANTONIO PELAYO | Corresponsal de Vida Nueva en Roma
“El papa Francisco ha querido reforzar la transparencia del Instituto para las Obras de Religión (IOR) con una nueva ley…”
Las recientes declaraciones del superior de la Fraternidad San Pío X son tan peregrinas que la Santa Sede ha preferido por ahora no responder. Bernard Fellay, en Kansas City, ha calificado al papa Bergoglio como “un verdadero modernista” y ha descrito la actual situación de la Iglesia como “un auténtico desastre”, asegurando que, si con Benedicto XVI la Iglesia católica habría continuado descendiendo, pero con paracaídas, Francisco, por el contrario, “ha cortado las cuerdas y ha puesto un cohete para ir hacia abajo”.
Con estas argumentaciones y comentarios aptos para una barra de café, es obvio que la Santa Sede tiene ya que esperar poco de una reconciliación con los seguidores de monseñor Lefebvre. Poco, por no decir nada.
En el nº 2.868 de Vida Nueva.
