Libros

Los símbolos del Apocalipsis


Una obra de Ignacio Rojas Gálvez (Verbo Divino, 2013). La recensión es de Antonio Llamas Vela

Los símbolos del Apocalipsis, Ignacio Rojas, Verbo Divino

Título: Los símbolos del Apocalipsis

Autor: Ignacio Rojas Gálvez

Editorial: Verbo Divino, 2013

Ciudad: Estella (Navarra)

Páginas: 244

ANTONIO LLAMAS VELA | El libro del profesor Ignacio Rojas Gálvez consta de cuatro partes muy concatenadas entre sí. La primera parte versa acerca del Apocalipsis, ¿un libro que influye en la historia? Sin pretenderlo, el autor describe una especie de pequeña historia de la exégesis sobre este libro. Este es el argumento del primer capítulo, que desarrolla en seis epígrafes (págs. 11-37).

La segunda parte expone en cuatro capítulos los aspectos centrales del tema. Así, el capítulo segundo manifiesta una realidad esclarecedora, porque se trata de definir los conceptos y significados de los términos apocalipsis, apocalíptica y apocalipticismo. El autor describe muy certeramente el dato histórico y usa de manera lógica las fuentes extrabíblicas: Flavio Josefo, así como los libros de la literatura llamada apócrifa.

Habla del sustrato semítico con materiales tomados de dicha tradición judía, pero no profundiza en ella, sino que simplemente la enuncia. Me parece muy interesante el encuadre histórico-social del Apocalipsis, su marco geográfico, las persecuciones contra la Iglesia cristiana. A mi parecer, aquí entraría una descripción sintética de los tres mundos a los que san Juan responde en toda su obra: el judío, el griego y el romano. Considero sugerente la finalidad de este libro.

Pero el Apocalipsis es también una llamada a la esperanza cristiana, porque Ha llegado el reinado sobre el mundo de nuestro Señor y de su Cristo; y reinará por los siglos de los siglos (Ap 11, 15). Creemos que esta es la clave hermenéutica de todo el libro del Apocalipsis.

El capítulo tercero describe de manera ágil y seria los símbolos como medio apocalíptico de comunicación. Este aspecto desarrollado acertadamente por Rojas contiene una serie de matices muy sugestivos y, al mismo tiempo, prácticos, porque ayudan a los lectores a saborear las páginas del Apocalipsis.

El capítulo cuarto nos presenta las claves para interpretar los símbolos del Apocalipsis. Este capítulo consta de tres secciones, a saber: el estilo, la técnica y la organización del material simbólico. Indica las fuentes del simbolismo en el Apocalipsis y estudia el símbolo de los 144.000. Ahora bien, si el Apocalipsis tiene un sustrato semítico o si preferimos un trasfondo judeo-cristiano, basado en los modelos y patrones del Antiguo Testamento, bueno es que el autor nos acercara de manera breve a los procedimientos, técnicas y recursos propios del judaísmo, sin relegar el análisis socio-histórico por el que Rojas se decanta.

El capítulo quinto define la resonancia histórica-social de la interpretación de los símbolos del Apocalipsis. Es un capítulo interesante por su aportación y actualidad. El autor relee, a la luz de la Palabra divina, las repercusiones e influencias de la simbología apocalíptica del último libro de la Biblia en la realidad histórica y social.

Dedica todo este capítulo al mundo de las visiones y nos refiere varias clases de modelos, desde el espiritual-idealista, el historicista, el futurista, el preterista, hasta el modelo pascual, que manifiesta de manera nítida la victoria de Cristo sobre el mal.

Cuestiones abiertas

La tercera parte expone las cuestiones abiertas acerca del Apocalipsis. El profesor Rojas dedica todo el capítulo sexto a explicar a grandes rasgos el valor de los símbolos apocalípticos hoy. Así, narra el símbolo en la modernidad tardía y reconoce que “gran parte de nuestra sociedad vive desconectada de la raíz originaria de los símbolos apocalípticos (…) y se hace imprescindible una adecuada interpretación y actualización de los símbolos apocalípticos, de modo que el simbolismo del libro renueve su fuerza provocativa de los orígenes” (pág. 174). El autor explica muy bien la actualidad del símbolo apocalíptico: el origen y el fin de la vida en el Apocalipsis, el tema del sufrimiento, la muerte.

Después nos interpela con la interpretación social para tiempos de crisis y surgen dos temas cadentes: la política y el miedo, dos realidades a las que responde el Apocalipsis. La simbología de la esperanza, que es fundamental en este libro bíblico, muestra los límites del mal, así como el compromiso con la humanidad, un mundo justo donde impere el bien, la verdad, la justicia y los valores eternos de la persona.

El capítulo séptimo está dedicado al Apocalipsis y sus símbolos en el séptimo arte. Releer el texto a la luz del misterio de Cristo mediante la realidad actual y aplicarlo al cine no es tarea fácil. El profesor Rojas lo logra. Una aportación a la cinematografía en la que se visualiza de alguna manera la Palabra divina a través de la imagen contemplada y escuchada. Todo ello debe estar insertado en la aspiración a la sabiduría. Poseer una actitud sapiencial, sobre todo, para comprender y asimilar lo que dice el Espíritu a la Iglesia como depositaria de la Revelación.

La cuarta parte versa sobre un solo capítulo: el resurgir actual de la apocalíptica y su simbología. El autor expone de manera clara tres grandes apartados: 1. El milenarismo: de la definición estricta al concepto de la ciencias humanas. 2. El resurgir de la apocalíptica hoy, con un detallado estudio del resurgir de la apocalíptica, el perfil de los movimientos apocalípticos actuales y la motivación fundamental: el ocaso de la tradición y el miedo. 3. La simbólica apocalíptica es descrita en los movimientos milenaristas.

El autor explica de manera sencilla los símbolos del fin de mundo, los símbolos de juicio y condenación, los símbolos de felicidad futura en un postapocalipsis. Cierra el presente libro una bibliografía comentada (págs. 225-234) y otra citada (págs. 235-239).

Felicitamos sinceramente al profesor Rojas Gálvez por este nuevo libro realizado con sencillez, pero con hondura en su exposición.

En el nº 2.882 de Vida Nueva

Actualizado
13/02/2014 | 18:52
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