El Congreso Apostólico Mundial de la Misericordia se reúne en agosto en Colombia
El cardenal Schönborn (centro) con representantes del CELAM.
LAURA MURCIA (Comunicaciones WACOM 2014) | La misericordia es una de las características más bellas de Dios. A lo largo de la historia de salvación, nos ha hecho ver cuánto nos ama y cómo su misericordia siempre responde a nuestra humanidad. El Congreso Apostólico Mundial de la Misericordia o WACOM (por las siglas en inglés de World Apostolic Congress on Mercy) nació como una respuesta eclesial a la llamada que nos hace el Evangelio en esta dirección.
En su encíclica Dives in misericordia (1980) y, durante su visita de 2002 a Cracovia, en su Polonia natal, el papa Juan Pablo II invitó a la Iglesia a hacer de la misericordia el núcleo central de la Revelación y el paradigma de la evangelización. Posteriormente, y por iniciativa de 17 cardenales de todo el mundo –con el austríaco Christoph Schönborn a la cabeza– se conformó el Patronato de la Misericordia y se celebraron el WACOM I (Roma, 2008) y el WACOM II (Cracovia, 2011).
Desde entonces, este Congreso Apostólico pretende que el mundo reciba el gran anuncio de la misericordia como epicentro del mensaje cristiano, para llegar a reconocer en toda la acción pastoral de la Iglesia la manifestación de esa misericordia de Dios, con el fin de compartirla y de fortalecer la comunión y la misión en la verdad y en la justicia.
Con más de 3.500 participantes provenientes de todo el mundo, en la última edición del encuentro, se determinó que el WACOM III tendría lugar en Bogotá, en agosto de 2014. “Realmente somos bendecidos al tener este Congreso en Colombia, un país que, en medio de tantos años de conflicto, ha vivido y necesitado la misericordia, por encima de muchos otros aspectos”, admite el padre Edgar Ardila, coordinador local del encuentro.
Testimonios, oración y misión
Bajo el lema Misericordia, nuestra misión en un solo corazón, durante los cinco días del Congreso Mundial (15-19 de agosto), se profundizará en el misterio, la comunión y la misión de la Iglesia desde la perspectiva de la misericordia, a través de conferencias, testimonios, talleres, celebraciones eucarísticas y momentos de oración. Entre los testimonios más esperados, se encuentran los de las víctimas y victimarios del conflicto armado en Colombia, quienes, en sus diferentes historias de vida, se han visto alcanzados, de uno u otro modo, por la misericordia divina.
La Iglesia debe considerar como uno de sus deberes principales el de proclamar e introducir en la vida el misterio de la misericordia, revelado en sumo grado en Cristo Jesús
Además, se destinarán espacios para la misión, a través del encuentro con la población local, gracias a obras de teatro, conciertos y encuentros de oración con la Palabra de Dios. En la última jornada se propondrán algunas líneas de reflexión y se llevará a cabo el envío a la misión universal.
A lo largo de estos meses de preparación, se está poniendo de manifiesto que la Iglesia está llamada a ser canal de misericordia para todos los que se acercan a ella. Así, según el obispo de la Diócesis de Itsmina-Tadó y director nacional del Congreso, Julio Hernando García Peláez, “la misericordia no es un movimiento de la Iglesia, es la Iglesia en movimiento”.
Sus palabras se hacen eco de aquellas otras que escribe Juan Pablo II en Dives in misericordia, cuando afirma que “la Iglesia debe considerar como uno de sus deberes principales el de proclamar e introducir en la vida el misterio de la misericordia, revelado en sumo grado en Cristo Jesús”. El Papa sostiene que este misterio no es solo para la Iglesia, en cuanto comunidad de creyentes, sino también para todas las mujeres y hombres, como fuente de una vida diversa.
Las actividades que se desarrollarán en la capital colombiana están pensadas como un espacio de participación, para profundizar en un estilo de vida al que somos llamados desde el Evangelio. Se espera que la invitación se extienda a muchas personas, de tal modo que no solo se animen a participar en este gran evento, sino que también estén dispuestas a acoger en sus casas a peregrinos llegados de diferentes partes del mundo y les muestren que en Colombia hay muy buenos anfitriones.
La fecha límite de inscripción en el WACOM III de Bogotá es el próximo 15 de julio. Para cualquier información adicional, se puede consultar la página web o enviar un correo electrónico a la siguiente dirección:
En nº 2.891 de Vida Nueva
