JOSÉ BELTRÁN | Director editorial de Vida Nueva
JUEVES 22. España tendrá que esperar. Francisco no viene. De momento. Tal era el convencimiento del “sí” que en Ávila ya estaba todo preparado sobre el terreno. Incluidas las tierras a expropiar temporalmente para poder acoger a cuantos quisieran desplazarse. Al Papa le bastaban unas horas con la Santa. Pero hemos mareado demasiado intentando arrancar un tiempo extra en la agenda del que no podía disponer.
VIERNES 23.Respiran tranquilos en Glasgow. Me cuentan que el presidente del Episcopado escocés, Philip Tartaglia, tuvo que ser ingresado en Salamanca hace unas horas, de noche, tras sufrir un ataque al corazón. Se encontraba con sus obispos en la reunión anual que convoca en el Royal Scots College. Un susto. Tartaglia ha vuelto a casa. Agradecido. Un tanto en atención para el Hospital Universitario de Salamanca.
SÁBADO 24. En noviembre le atropelló un coche en Zamora. Pero Adrián, con la férula en su pierna, no solo quiso cumplir con los deberes de Cono. Desde casa, participó en el I Concurso de Cuentos de la Infancia Misionera. Hoy recoge una mención especial. El jurado no sabía de las muletas de Adrián. La intrahistoria tiene premio.
DOMINGO 25. El padre Iván invita a dejar “las pantuflas” en casa como Jonás y salir al rescate de Nínive. Espíritu misionero. Los niños sonríen. Los mayores toman nota.
LUNES 26. El cardenal Sistach no tiene miedo a jubilarse. Lo tiene más que asimilado. No se aferra. Pero tampoco hay prisa para el relevo. Compartido por el Papa.
En el nº 2.927 de Vida Nueva.
