Conmoción eclesial ante el accidente del avión de Germanwings

El Papa y los obispos españoles y germanos envían mensajes de pésame

M. Á. MALAVIA | El papa Francisco ha mostrado su consternación ante el accidente del avión de ayer martes 24 de marzo, que cubría la ruta Barcelona-Düsseldorf y se estrelló en los Alpes franceses, costando la vida a sus 150 ocupantes, de los cuales entre 45 y 47 personas eran españoles. También los obispos españoles y los alemanes han enviado su pésame a las familias de las víctimas.

En torno a las 11 de la mañana del martes, un avión de la compañía alemana Germanwings que había salido del aeropuerto barcelonés del Prat y que se dirigía a Düsseldorf, se estrelló en plenos Alpes franceses, muriendo todos los pasajeros y personal de la tripulación.

Ante la brutalidad de la tragedia, las reacciones llegaron desde el primer momento a todos los niveles. En el eclesial, el papa Francisco, a través de un telegrama firmado por su secretario de Estado, Pietro Parolin, mostró su consternación y rogó “por el eterno descanso de los fallecidos, confiando en la misericordia de Dios para darles la bienvenida a su casa de paz y de luz”.

La Conferencia Episcopal Española (CEE) se ha sumado a estas intenciones con otro comunicado, en el que expresó “su dolor por la pérdida de vidas humanas y su condolencia a los familiares de las víctimas”, encomendando a Dios “el eterno descanso de los fallecidos”.

A nivel personal, el cardenal de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, también quiso mostrar su pesar y pidió “a los sacerdotes y a las comunidades cristianas de la archidiócesis que en los próximos días y en las celebraciones de la Eucaristía quieran orar por el eterno descanso de las víctimas y den consuelo y serenidad a sus familiares y amigos”.

En otro mensaje, Reinhard Marx, presidente del Episcopado alemán (la mayoría de las víctimas son germanas), recibió la noticia “con gran tristeza y un profundo pesar”. “Recordamos a las víctimas de este desastre –concluyó–. Eran gente a la que, de repente e inesperadamente, le arrancaron su derecho a la vida”.

Tres días de luto oficial

En el ámbito político, los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, que se encontraban en París en su primer viaje de Estado como monarcas, anularon la visita y regresaron a Madrid. Antes, aprovechando que se encontraban reunidos con el presidente de la República francesa, François Hollande, y con sus respectivos ministros de Exteriores, celebraron un gabinete de crisis en el que abordaron los primeros pasos a dar.

Profundamente conmovido, antes de abandonar la capital gala, Felipe VI insistió en expresar “nuestras condolencias más sinceras, de todo corazón, a las familias que han perdido a sus seres queridos en este día”.

Por su parte, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, decretó tres días de luto oficial en todo el país y viajó al día siguiente, junto al presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, al lugar del accidente.

En el nº 2.935 de Vida Nueva