MARÍA GÓMEZ | El Vaticano ha presentado en la mañana de hoy viernes 13 de enero el Documento Preparatorio con el que se inician los trabajos del próximo Sínodo de los Obispos. Será la XV Asamblea General Ordinaria, que tendrá lugar en 2018 (la fecha aún está por determinar) y estará dedicada a los jóvenes, concretamente a “Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional”. Para esa reunión, la Iglesia empieza a prepararse ya, y lo primero es ponerse a la escucha de lo que sus propios miembros, especialmente la juventud, tiene que decir al respecto. Así las cosas, y siguiendo la línea tomada por Francisco en citas anteriores, se abre un tiempo de consulta.
El Documento Prepatorio lleva adjunto un cuestionario, dirigido todo ello a todas las conferencias episcopales, a los dicasterios de la Curia romana y a la Unión de Superiores Generales, a los Sínodos de los Obispos y a los Consejos de los Jerarcas de las Iglesias Orientales Católicas. Por otra parte, se prevé una consulta de todos los jóvenes a través de un sitio web, con un cuestionario sobre sus expectativas y su vida. Las respuestas que se obtengan de ambos cuestionarios serán la base para redactar el posterior Instrumentum laboris, punto de referencia para la discusión de los padres sinodales.
El Documento Preparatorio quiere ser una especie de mapa para fomentar una investigación sobre el contexto de la juventud de hoy y de qué manera responde al camino que le presenta la Iglesia. En este sentido, propone una reflexión articulada en tres pasos o capítulos:
El Documento Preparatorio lleva anexo un cuestionario cuyo objetivo es ayudar a los organismos interpelados (conferencias episcopales, Curia, etc.) a que expresen cómo entienden el mundo juvenil y a leer su experiencia en el acompañamiento vocacional. Los organismos deben responder con un dossier que contenga: 1 página de información estadística (número de habitantes en el país, porcentaje de católicos, porcentaje de jóvenes, etc.), 7u 8 páginas de “lectura de la situación” y 1 página mas para cada una de las tres experiencias que se quieren compartir.
Para leer la situación, las 15 primeras preguntas hacen referencia a la relación entre la Iglesia y los jóvenes, tanto creyentes como alejados, y las cuestiones son tan concretas como: “¿De qué modo escucháis la realidad de los jóvenes?”, “¿Qué espacios de participación tienen los jóvenes en la vida de la comunidad eclesial?”, “¿Cuál es la impliación de las familias?”, “¿Cuánto tiempo y espacio dedican los pastores y los otros educadores al acompañamiento espiritual personal?”, etc.
Se añaden 12 preguntas más para centrar el análisis por regiones geográficas (África, América, Asia y Oceanía, y Europa).
Finalmente, se piden ejemplos de las prácticas pastorales de acompañamiento y discernimiento vocacional que se aplican actualmente en los países y tres prácticas o experiencias en este sentido.
Simultáneamente, se ha publicado también una carta del Papa a los jóvenes, en la que Francisco les anima –como ha hecho en tantas ocasiones– a no sucumbir al “ruido y aturdimiento” del mundo y reitera el acompañamiento y disponibilidad de la Iglesia.
“En Cracovia –escribe el Papa–, durante la apertura de la última Jornada Mundial de la Juventud, les pregunté varias veces: ‘Las cosas, ¿se pueden cambiar?’. Y ustedes exclamaron juntos a gran voz ‘¡sí!’. Esa es una respuesta que nace de un corazón joven que no soporta la injusticia y no puede doblegarse a la cultura del descarte, ni ceder ante la globalización de la indiferencia. ¡Escuchen ese grito que viene de lo más íntimo!”.
Y les exhorta: “Un mundo mejor se construye también gracias a ustedes, que siempre desean cambiar y ser generosos. No tengan miedo de escuchar al Espíritu que les sugiere opciones audaces, no pierdan tiempo cuando la conciencia les pida arriesgar para seguir al Maestro. También la Iglesia desea ponerse a la escucha de la voz, de la sensibilidad, de la fe de cada uno; así como también de las dudas y las críticas. Hagan sentir a todos el grito de ustedes, déjenlo resonar en las comunidades y háganlo llegar a los pastores”.