Dos obras de Enrique Pallarés Molíns (Mensajero) y Pax Dettoni (Desclée De Brouwer). La recensión es de Fernando Cordero Morales, SS.CC.
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Título: El perdón como fortaleza humana
Autor: Enrique Pallarés Molíns
Editorial: Mensajero
Ciudad: Bilbao, 2016
Páginas: 248
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Título: Puentes de perdón
Autora: Pax Dettoni
Editorial: Desclée De Brouwer
Ciudad: Bilbao, 2016
Páginas: 192
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FERNANDO CORDERO MORALES, SS.CC. | Nos aproximamos, en primer lugar, a El perdón como fortaleza humana, la obra de Enrique Pallarés Molíns, jesuita navarro (Ablitas, 1944), doctor en Psicología y profesor emérito de la Universidad de Deusto, escritor de varios libros y aficionado a la lectura. En su método de trabajo, toma nota de cualquier cuestión psicológica que le resulta de interés, busca bibliografía sobre la misma y va profundizando en el tema, que se convierte en material que utiliza en las entradas de su blog.
Estamos ante un gran libro, documentado con las más diversas y autorizadas fuentes, profundo, que invita al diálogo y a la interiorización, ameno en su lectura, llamado a convertirse en obra de referencia, sobre todo, en el enfoque psicológico del perdón –sin excluir otras perspectivas– en el ámbito intrapersonal e interpersonal. El autor, por tanto, presta especial atención a la experiencia que tiene lugar dentro de la persona y entre las personas. Aunque se menciona, sin embargo, no desarrolla la cuestión del perdón entre grupos ni en la relación de la persona con la divinidad, asuntos que darían de por sí para otros volúmenes.
Cuenta con veinte capítulos, que despliegan el camino que lleva de la ofensa a la compasión, culmen del nivel humano más profundo. En medio, las distintas reacciones y aspectos del perdón, incluyendo cómo se puede vivir en determinados contextos (familia, escuela y trabajo). Los capítulos 11 al 17 resultan muy interesantes, ya que reflexionan sobre algunas estrategias que ayudan al avance de actitudes que fomentan el itinerario hacia el perdón: sanar la memoria, cambios en el pensamiento, trabajar la conducta, el papel de la empatía, el conjunto variado de emociones y una autoestima sana. Después de la lectura, podemos caer en la cuenta de aspectos que ni siquiera nos planteábamos hasta ese momento.
Se nota la experiencia docente y de trabajo con grupos del autor, que lleva al final de cada capítulo a esbozar un apartado de preguntas, para ayudar a asimilar la comprensión de los contenidos y dar pie al diálogo. En otras ocasiones presenta algún texto sugerente para la reflexión con igual finalidad. Así nos implica de forma activa en la realidad del perdón, que nos empuja a conocer mejor la tesis de este volumen: la fortaleza humana del perdón, que estimula a la reconciliación interior e interpersonal, preparándonos para la paz social.
‘Puentes de perdón’
Y si por la vía del ensayo, del estudio sistemático, no encontramos un lenguaje que cale en nuestros contemporáneos, Pax Dettoni Serrano (Vielha, 1978), antropóloga social y cultural, nos propone el itinerario narrativo –o del llamado Teatro de Conciencia– de un moribundo que, en su última mañana de vida, recibe la visita de un ser que procede de su propia alma. Con él, logrará revisar ocho relaciones personales pendientes, con las que ha de tender puentes de perdón. No tanto analizando los defectos de los otros –pecados, lujuria, envidia, avaricia…– cuanto descubriendo sus propias carencias que, con frecuencia, han derivado en juicios condenatorios hacia su madre, su hijo, sus amigos, etc. Con el libro precedente hay una clara coincidencia de fondo en torno al perdón: “Es esta una historia de proceso y no de resultado” (p. 23).
En el prólogo, el monje benedictino Jordi Castanyer i Bachs rememora la novela La muerte de Iván Illich, de León Tolstoi, donde el protagonista, enfrentado a la proximidad del final de sus días, va transformándose. También Juan, el personaje principal del texto de Pax Dettoni, va a transitar, a veces con gran conmoción, por la vía del perdón para acariciar la serenidad, el equilibrio y el sentido, alejándose de la incoherencia ciega que ha acompañado su matrimonio y el devenir de su existencia.
Este volumen nos muestra la necesidad de confrontarnos con transparencia y sinceridad, por lo que también merece la pena destacar el epílogo, en el que se nos brinda un plan de entrenamiento para cruzar esos Puentes de perdón, con diferentes ejercicios: para vencer los siete pecados capitales y la cobardía, para perdonar, para pedir perdón y agradecimientos. Por último, nos ofrece una serie de recomendaciones, entre las que selecciono la siguiente: “Entrena siete días y no descanses ninguno”.
Publicado en el número 3.022 de Vida Nueva. Ver sumario