La Autoridad de Información Financiera (AIF) del Vaticano ha presentado hoy martes 16 de mayo su informe del pasado año 2016. Una año particularmente bueno para el organismo, que ha incrementado los canales de cooperación con diferentes organismos internacionales para luchar “contra las actividades financieras ilegales y consolidar el sistema de información de actividades sospechosas”, según han declarado el presidente del organismo, René Brülhart.
Esta cooperación para acabar con los delitos financieros se mantendrá en el futuro, ya que el Vaticano se ha propuesto el reto de “seguir siendo un socio activo para combatir las actividades financieras ilegales a nivel mundial”.
La misión principal de este ente vaticano creado en 2010 por Benedicto XVI es la supervisión financiera, en particular, a través de la prevención y la lucha contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo.
El compromiso por la cooperación lo confirman las cifras que ha aportado el director de la AIF, Tommaso Di Ruzza, ya que el número de “avisos de transacciones sospechosas” ha continuado su tendencia a la baja: en 2016 se han detectado 207 transferencias dudosas frente a las 544 en 2015, cifra que entonces ya suponía una reducción considerable a pesar de que las entidades supervisadas por la Santa Sede han aumentado.
Estas transacciones se refieren fundamentalmente a organismos no dependientes directamente del Vaticano, como pueden ser las congregaciones religiosas que trabajan en diferentes zonas concretas que no están controladas por la AIF, solo informan de sus movimientos. Para Brülhart, estos indicadores están dentro de los parámetros aceptables por los estándares internacionales.
Para Di Ruzza es destacable, también, el hecho de que se observa una “mejoría en términos de calidad con un impacto positivo”, ya que se investiga más en profundidad y muchos de los 22 últimos procesos han sido desestimados por los órganos judiciales vaticanos, con los que existe “colaboración y coordinación”, ha destacado Di Ruzza.
Otro dato importante es el de los casos de relaciones internacionales para la colaboración, que ha crecido hasta los 837 de 2016, cuando tan solo cuatro años atrás se produjeron 81. En este último años, se han firmado acuerdos con las respectivas agencias en países como Austria, Brasil, Canadá, Italia, Panamá, Polonia o Rusia, que se suman a países que ya contaban con esta relación Cuba, Francia, Alemania, Italia, Paraguay, Perú, España, Suiza, Reino Unido o Estados Unidos, entre otros.
Además, desde el año pasado, la AIF ha terminado los procesos para implementar una nueva regulación sobre la supervisión y la prevención de las actividades financieras, así como nuevos principios de contabilidad y de presentación de estadísticas.