Al ser detenido, dijo llamarse John René Rockschiil y ser de nacionalidad francesa; más tarde se identificaría como actor estadunidense, pero hasta el momento ninguna de las dos versiones ha sido confirmada, pues en los archivos de las autoridades migratorias de México no existe ninguna persona que, con ese nombre, haya ingresado al país.
Se trata del hombre, de aproximadamente 28 años, que el pasado lunes 15 de mayo apuñaló brutalmente al sacerdote José Miguel Machorro en la Catedral Metropolitana de México, al término de una Misa de acción de gracias con motivo del “Día del Maestro”.
El individuo, que hasta el momento se encuentra detenido en la Agencia Central de Investigación de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX), se ha reservado su derecho a declarar, lo que ha obstaculizado las indagatorias en su contra por el delito de tentativa de homicidio.
En tanto, la PGJCDMX ha dado a conocer que el detenido, quien es asistido por un defensor de oficio, también se ha negado a que se le practique la toma de huellas dactilares para determinar su identidad, por lo que se ha solicitado audiencia ante un Juez de Control, a fin de que autorice la realización de dicha prueba.
También informó que tras su detención, si bien el presentado se negó a que se le realizara una valoración, el médico legista hizo una serie de apreciaciones mediante las cuales pudo constatar que no se encontraba bajo sustancias tóxicas o en estado de ebriedad, por lo que sugirió una revisión psiquiátrica en un hospital del Sector Salud.
El diagnóstico del agresor
Como resultado de los estudios practicados en el Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez –explica el comunicado de la PGJCDMX–, perteneciente a la Secretaría de Salud Federal, el médico psiquiatra que lo valoró, concluyó que el individuo padece un trastorno mental, denominado Trastorno Psicótico, cuyo origen aún no se determina.
Por lo consiguiente, no se encuentra apto para rendir declaración ante las autoridades ministeriales o judiciales, pues además no tiene la capacidad para entender el carácter ilícito de un hecho, así como de conocer y querer realizarlo. “Y en el caso que el presentado sea trasladado a un centro penitenciario, se ha instruido que reciba atención psiquiátrica y se valore la instalación para su tratamiento”.
La Procuraduría informó que con esta valoración psiquiátrica, así como otros elementos de prueba que obran en la carpeta de investigación, el Ministerio Público solicitará en breve a un juez que esta persona sea ingresada en el Centro Varonil de Rehabilitación Psicosocial (CEVAREPSI), en el Reclusorio Preventivo Varonil Sur, para el tratamiento que le corresponda.
El diagnóstico de la víctima
En tanto, la Arquidiócesis de México comunicó que el Padre José Miguel Machorro evoluciona bien. Incluso, según el reporte médico de este miércoles 17 de mayo, el P. Machorro Alcalá podría salir mañana de la unidad de cuidados intensivos del hospital privado en el que se encuentra internado.
“Sigue la evolución normal del postoperatorio; ya no está intubado y respira por sí solo; oxigena muy bien y ya está plenamente consciente, por lo que podría salir mañana de la unidad de cuidados intensivos”, señala el parte médico.