Atrás quedan aquellos tiempos en los que España era el bastión de la catolicidad en Europa. Hoy, los países balcánicos son los más creyentes del Viejo Continente, mientras Europa Central sigue su camino hacia la secularización, según el estudio sobre creencias religiosas elaborado por WIN/GIA a nivel internacional y por el Instituto DYM en España publicado el pasado abril.
Como pone de manifiesto el estudio a nivel mundial, realizado a 68 países de los cinco continentes, los países más religiosos son Tailandia (98%) y Nigeria (97%). El contrapunto es China, donde solo el 9% de la población es creyente y siete de cada diez personas se declaran ateas convencidas.
En la actualidad, solo el 37% de los españoles se consideran religiosos (se incluye practicantes y no practicantes). Mientras, el 41,1% se declaran no religiosos y el 15,6% ateos convencidos. Pese a ello, según el informe ‘La Religiosidad en España’, publicado también en abril, casi la mitad de los españoles (49%) cree en Dios.
Unos datos que contrastan con el último Barómetro del CIS (datos de marzo), en el que el 69,9% de los encuestados admite ser católico, mientras que ateos y no creyentes no superan juntos el 24,7%.
Los datos que muestra el estudio sobre España muestran un país alejado de la fe, que se muestra por debajo de la media mundial, incluso muy por debajo en algunos factores. Así, el 62% de los encuestados a nivel mundial se considera religioso; es decir, 25 puntos por encima de los españoles. Mientras, el 71% cree en Dios; es decir, 22 puntos menos que la media.
Lejos está España de sus vecinos en cuanto a las personas que se declaran creyentes. Y es que el 59% de los portugueses lo son, una cifra que aumenta 10 puntos más en Italia, que está a tan solo cinco puntos de doblar la media española.
“El estudio confirma que la religión es un aspecto relevante en la vida de las personas a nivel mundial, a pesar de que la historia y los niveles educativos de los países tienen una influencia considerable en la percepción de los individuos”, explica Vilma Scarpino, presidenta de WIN. Además, añade: “Alrededor de tres cuartas partes de la población mundial cree en Dios, lo que demuestra lo importante que es para las personas tener fe”.