La Iglesia de Venezuela: una Asamblea Constitucional es innecesaria e inconveniente

Como innecesaria e inconveniente, calificó el presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), Diego Padrón Sánchez, la iniciativa de una Asamblea Nacional Constituyente. “Lo que hace falta no es reformar el texto constitucional, sino que el Gobierno le dé cumplimiento a su letra y a su espíritu”, reiteró el obispo, al recibir en la sede de la conferencia episcopal a los miembros de la Comisión Organizadora de la Asamblea, en cabeza de su presidente, el ministro de educación Elías Jaua Milano.

Una vez concluida la 43ª Asamblea Extraordinaria de la CEV(16-18 de mayo), y luego que fue dada a conocer la exhortaciónde los obispos frente a la agudización de la crisis en Venezuela, la reunión que se produjo ayer(viernes 19)con Jaua Milano,acogiendo su solicitud del pasado 9 de mayo.El encuentro también sirvió como escenario para que el presidente de la CEV expusiera, personalmente, las razones que fundamentan la negativa de los obispos venezolanos ante la propuesta del gobierno de Nicolás Maduro.

“Comienzo por manifestarles con mucho respeto que los obispos hemos decidido, después que hayamos escuchado su exposición, no entrar a debatir con ustedes los pro y los contra de la iniciativa presidencial”, afirmó Padrón en su intervención, aduciendo que “ya hemos declarado nuestra opinión al respecto”.En efecto, sus palabras refirieron los dos pronunciamientos de la CEV el 5 y el 17 de mayo.

El pueblo no necesita una Asamblea Constituyente

Concretamente, sobre la Asamblea Constituyente el obispo señaló que “es innecesaria, porque no es lo que el pueblo necesita. Lo que necesita y reclama el pueblo, en primer lugar, es comida, medicinas, seguridad, paz y elecciones justas”. Aún más, “la iniciativa presidencial tiene muy escasa aprobación” y “no ha traído tranquilidad al país”.

Por otra parte, la CEV recuerda que la estructura comunal que se pretende introducir a través de la Constituyente, ya ha sido rechazada por la ciudadanía en la consulta realizada en 2007, y “la soberanía popular debe ser respetada”, toda vez que “la eventual instalación de una Asamblea Nacional Constituyente suprimiría de facto el ejercicio de la Asamblea Nacional”.

Frente al argumento del gobierno de que la Asamblea Nacional Constituyente tienen como objetivo el diálogo y la paz, Padrón destacó que, aunque “la Iglesia apoya y comparte este objetivo”, la realización de dicha Asamblea “es inconveniente, porque no contribuye al entendimiento de los venezolanos”.

Consulta popular

Como alternativa, el presidente de la CEV planteó el camino de la consulta popular: “Hablo de una consulta universal, con voto directo y secreto, tal como lo prevé nuestra Constitución Nacional, en base al principio de ‘una persona, un voto’. El pueblo es el verdadero sujeto social de la democracia”.

Antes que profundizar en las motivaciones jurídicas del proyecto de Constituyente, la CEV expresó, una vez más, su preocupación por los graves problemas del país. En este sentido, Padrón exhortó al gobierno a “abrir un espacio para la reflexión sobre otros asuntos de gran envergadura en los que el Gobierno nacional y la Iglesia pudieran trabajar de común acuerdo en bien del país”.

El servicio que ofrece tanto Cáritas como la pastoral penitenciaria, podría ser vital para la adquisición y distribución de alimentos y medicinas, así como la atención que requieren los ciudadanos que se encuentran privados de la libertad.