La entidad solicita al Gobierno replantear la Ley 1448 del 2011
El Servicio Jesuita para Refugiados de Colombia ha manifestado su preocupación por la problemática del desplazamiento forzado en el país.
Ayer dio a conocer un documento a través del cual describe de qué forma nuevas conflictividades, asociadas en su mayoría a economías ilegales, agudizan la situación de vulnerabilidad de diversos sectores sociales, mientras se busca poner fin a un conflicto histórico.
La institución le pide al gobierno nacional garantizar el desmantelamiento del paramilitarismo, generar condiciones para la no repetición de hechos victimizantes y reparar adecuadamente a las víctimas de desplazamiento forzado.
Según ella, la baja capacidad estatal para responder efectivamente a las víctimas del conflicto armado reconfigura las causas directas y estructurales de los desplazamientos forzados en el país. A lo anterior se agrega el afianzamiento de megaproyectos de desarrollo y economías extractivistas, así como las acciones del ELN y la reorganización y consolidación de los grupos paramilitares posdesmovilización.
Particularmente, la entidad solicita al Gobierno replantear la Ley 1448 del 2011, establecer medidas de protección y prevención para las comunidades que siguen en riesgo, fortalecer la institucionalidad pública, avanzar en soluciones duraderas para la reconstrucción de proyectos de vida y crear una política amplia para las víctimas en el exterior.
La organización subraya que en el primer lugar se debe poner a la persona, que se debe reconocer su dignidad y atender sus necesidades en cumplimiento con los derechos humanos. En ello concentra su labor, al tiempo que reafirma su compromiso con la construcción de paz.