Miembros del movimiento Iglesia de los pobres, que aglutinó décadas atrás a comunidades eclesiales de base del todo el país, se han reunido en el municipio de San Francisco, Cundinamarca. El objetivo del encuentro es “fortalecer el espíritu de unidad de las fuerzas proféticas de la Iglesia” y evaluar el proceso histórico de construcción de la iniciativa, surgida en los 80.
En una invitación a los participantes, firmada por Maritze Trigos, Mario Peresson, Javier Giraldo, Omar Fernández, Pedro Joya y Diego Perez, se resalta la importancia de secundar un modelo eclesial semejante al que propone el papa Francisco, capaz de ser “fermento de liberación en la edificación de un pueblo pionero de cambio estructural”.
La actividad también busca fortalecer el proceso de la Mesa Ecuménica por la Paz, cuyo quinto encuentro nacional tendrá lugar en Ibagué, en el mes de octubre.
Miembros del movimiento Iglesia de los pobres hoy hacen parte de esta iniciativa, en que coinciden cristianos de diversas confesiones. Algunos de ellos, como el padre Octavio Correal, han adelantado acciones de veeduría en relación con el proceso de paz entre el Gobierno y las FARC y esperan poder contribuir al diálogo con el ELN.
La reunión de San Francisco se ha propuesto centrar su atención en la coyuntura histórica que vive el país y profundizar las opciones que estimulan la participación de los cristianos en el movimiento social.
