Con una vista que ha durado en torno a las dos horas, ha comenzado en el Tribunal vaticano, en la mañana de hoy martes 18 de julio, el proceso en el que están acusados de malversación de fondos el expresidente, Giuseppe Profiti, y el extesorero, MassimoSpina, de la fundación del hospital pediátrico Bambino Gesù. Los acusados han acudido con los abogados Antonello Blasi, por Profiti, y Alfredo Ottaviani, por Spina. La audiencia ha estado presidida por el juez Paolo Papanti-Pellettier.
El fiscal –promotor de justicia, en terminología canónica–, Giampiero Milano, ha presentado en informe con las acusaciones que se habían hecho públicas hace una semana. Los dos exdirectivos de la fundación que recauda los donativos para la institución sanitaria vaticana habrían desviado presuntamente 422.005,16 euros para las reformas de un edificio del Governatorato vaticano en el que se trasladó a vivir tras su jubilación el cardenal Tarcisio Bertone, ex secretario de Estado. Un delito que se habría cometido entre noviembre de 2013 y mayo de 2014.
Las peticiones de la defensa
Los abogados defensores, por su parte, han elevado diferentes peticiones, como que los periodistas presentes no siguiesen el juicio desde la sala del tribunal, ya que consideraba que estaban situados demasiado cerca. El fiscal ha rechazado este argumento aludiendo al “interés público” del proceso, decisión que han ratificado los jueces.
También han intentado cuestionar la soberanía Vaticana sobre el propio hospital –el cual, precisamente, forma parte de las consideradas zonas extraterritoriales en las que la Santa Sede tiene jurisdicción, aunque los despachos de la fundación estén en suelo italiano–, o que el procedimiento sea meramente administrativo y no penal.
El resto de peticiones de la defensa se han centrado en minimizar las responsabilidades de los procesados en su acceso al dinero de la fundación.
Aceptada una carta de Bertone
El magistrado también ha abierto la posibilidad, con el acuerdo del abogado de Massimo Spina, de incorporar como prueba una carta del cardenal Bertone, que abre la posibilidad a la declaración del que fuera secretario de Estado vaticano.
Se refiere a la carta publicada por el semanario L’Espresso, fechada en noviembre de 2013. En esa carta, el cardenal menciona el abono de la reestructuración del inmueble por parte de la fundación, aunque previamente el cardenal Bertone había pagado de su bolsillo directamente al Governatorato 300.000 euros para la obra. De esta manera, la misma intervención se habría pagado dos veces, desviándose los fondos procedentes de las donaciones al hospital.
El juicio se retomará el próximo 7 de septiembre, precisamente coincidiendo con el viaje del papa Francisco a Colombia y anticipando el fin de las vacaciones de los magistrados vaticanos, que deberían extenderse hasta el 20 de septiembre.
