“Dios, fuerte y misericordioso, que destruyes las guerras y derribas a los soberbios; apresúrate a liberarnos de las calamidades y peligros para que todos podamos experimentar que en verdad somos hijos tuyos. Por Nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo que vive y Reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios por los siglos de los siglos. Amén”.
Esta fue la oración que la Conferencia del Episcopado Panameño (CEP) difundió para que se rezara en todos los templos del país este fin de semana, con la finalidad de pedir a Dios que cese la violencia en Venezuela y se alcance una solución pacífica al conflicto social que sufre esa nación latinoamericana.
El llamado a la oración coincidió con los comicios que tuvieron lugar este domingo en Venezuela para elegir a 545 representantes que integrarán la Asamblea Nacional Constituyente, el órgano que redactará una nueva Constitución y que tendría mayores poderes que el actual Parlamento, que es de mayoría opositora.
La jornada electoral se llevó a cabo pese al rechazo de buena parte de la comunidad internacional y en medio de una serie de protestas que iniciaron el pasado 1 de abril, y que han causado hasta el momento la muerte de 120 personas.
En este contexto, los obispos de Panamá hicieron pública su preocupación por la grave situación de crisis que están sufriendo los venezolanos, “que se encrudece cada vez más con los continuos enfrentamientos”.
La CEP se unió a la invitación de la Conferencia Episcopal Venezolana que el pasado 27 de julio, a unos días para las elecciones de la Asamblea Nacional Constituyente, llamó al pueblo a no dejarse robar la esperanza, y recordó a las Fuerzas Armadas Nacionales Bolivarianas que su papel primario es mantener la paz y el orden “para que la racionalidad y el actuar de las partes en conflicto tienda puentes que superen el caos en el que estamos sumidos”.
“No aumentemos más el sufrimiento y la angustia de tanta gente que quiere vivir en paz, que se escuche y respete su voz de protesta y se encuentren caminos de entendimiento y bien para todos”, fue el fragmento del mensaje del Episcopado Venezolano que los obispos panameños destacaron en su convocatoria de oración.
“Convencidos de la fuerza de la oración –señalaron– solicitamos que en todas las parroquias del país, los fieles puedan orar de manera muy especial por los venezolanos como signo de cercanía y solidaridad de nuestro pueblo panameño”.
