En medio de una sangrienta jornada que deja por lo menos una decena de muertos y otras más de heridos, se desarrollaron ayer domingo 30 de julio las elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente convocada por el gobierno del presidente Nicolás Maduro en Venezuela, a pesar de la presión de la oposición y de las críticas de la comunidad internacional y de la propia Iglesia católica.
“Los obispos estamos todos unánimes en contra de la Constituyente”, reafirmó este domingo el cardenal Jorge Urosa, arzobispo de Caracas. “Nosotros estamos con el pueblo, y la mayoría del pueblo venezolano no quiere la Constituyente”, agregó.
“Esta violencia no tiene ningún sentido”
También el cardenal Baltazar Porras, arzobispo de la arquidiócesis de Mérida –una de las regiones más golpeadas por la violencia durante este fin de semana– se refirió a la jornada electoral pidiendo “que haya de verdad un sentido auténtico de esperanza, de reconciliación y de perdón, que es el único camino para la paz, y que toda esa violencia desatada desaparezca porque no tiene ningún sentido”. El cardenal, quien el mismo 30 de julio cumplió 50 años de ordenación sacerdotal, también recordó a las víctimas fatales e invitó a orar por ellas.
Solamente en el estado de Mérida cuatro personas murieron este domingo, que se suman a otras tres entre el viernes y el sábado anterior. En Táchira, dos adolescentes de 17 y 13 años también fallecieron durante las protestas, según ha informado la fiscalía venezolana. La Mesa de la Unidad Democrática, por su parte, ha informado que el saldo de víctimas de la jornada electoral llegaría a 16.
Tras la apertura de las mesas de votación a las 6:00 am., los primeros enfrentamientos entre los manifestantes de la oposición y los militares venezolanos se produjeron hacia las 10:00 am. La ola de protestas y de violencia se intensificó con el pasar de las horas en varias ciudades, especialmente en Caracas, donde un artefacto explosivo dejó siete miembros de la policía heridos.
Confrontación en redes sociales
La confrontación también se vivió en las redes sociales, donde se puso en evidencia la polarización del pueblo venezolano. Mientras que el oficialismo promovía el hashtag #VenezuelaVotaHoy y #VenezuelaEleccionesEnPaz, la oposición respondía con #ConstituyenteFracasoEvidente y #YoNoVotéPorLaConstituyente.
Al final de la jornada, la oposición anunciaba que la abstención fue superior al 87%, aunque aseguraba que, sin importar el número real, el Gobierno difundiría cifras superiores a los 7,6 millones de votos que rechazaron la Constituyente en el plebiscito simbólico del 16 de julio.
A pesar de que el Gobierno ya ha anunciado que dentro de 72 horas se instalará la Asamblea Nacional Constituyente con sus 545 miembros elegidos, varios países ya han manifestado que no reconocerán los resultados, entre ellos México, Colombia, Panamá, Argentina, Costa Rica, Perú, Estados Unidos, Chile, Brasil, España y Canadá.
