El sacerdote que el pasado 15 de mayo fue atacado en la Catedral de México con un arma punzocortante, sufrió una grave recaída en su salud, que lo tiene en riesgo de muerte.
El padre José Miguel Machorro había sido dado de alta de un hospital privado en la Ciudad de México a principios de julio, y convalecía en casa de su madre en Ajalpan, Puebla; sin embargo, hace poco más de una semana fue internado de emergencia por sus familiares en el Hospital General en Tehuacán, en el mismo estado.
Diagnóstico crítico
El pasado fin de semana la salud del sacerdote se complicó debido a un problema intestinal de carácter infeccioso, lo que le provocó inflamación generalizada del cuerpo, baja presión arterial y distención en el intestino, al punto de quedar prácticamente paralizado, además de una seria afectación en el riñón.
El hermano del sacerdote explicó al Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (www.siame.mx) que la fuerte lesión que el padre José Miguel Machorro sufrió en la yugular ocasionó que la parte derecha de su cuerpo esté inmóvil y que haya tenido un trastorno neurológico, lo cual también podría estar provocando la inmovilidad en el intestino, y por consiguiente, que cualquier infección lo ponga en grave riesgo.
Consideró que el Hospital General de Tehuacán tenía algunas limitantes, por lo que la familia estaba valorando la posibilidad de que el padre Machorro fuera trasladado de nueva cuenta a la Ciudad de México para ser atendido, pues cada día tenía más dificultades incluso para hablar; sin embargo, también manifestó el temor de realizar el viaje por carretera, pues éste podría ser fatal.
Ayer lunes, el sacerdote volvió a ser intubado.
El gobierno atiende la emergencia
Este martes, se ha informado que por instrucciones del gobernador de Puebla, Antonio Gali Fayad, el padre Machorro fue traslado en un helicóptero al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, donde buscarán por todos los medios su recuperación, y posteriormente recibirá atención de la afectación neuronal, donde se encuentra la raíz de las complicaciones de salud que ha registrado el sacerdote últimamente.
La aeronave del gobierno poblano está asignada a los Servicios de Urgencias Médicas Avanzadas, y partió esta mañana del Hospital General de Tehuacán directamente al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición, adonde arribó alrededor del mediodía. El sacerdote ya se encuentra en la Ciudad de México.
Por otra parte, y según el SIAME, el Arzobispo de México habría realizado las gestiones ante la Presidencia de la República para dar cauce a los trámites y facilitar el ingreso del padre machorro a dicho hospital, a fin de que sea atendido de inmediato y logre salvar la vida.