El secretario de Estado, Pietro Parolin, viajará a Moscú del 20 al 24 de agosto, donde se verá con Vladimir Putin y el patriarca ortodoxo Kirill. “En este momento histórico, en el que vemos un aumento de las tensiones y los conflictos en diversas partes del mundo, la paz es para Francisco y para mí personalmente una prioridad clara e imperativa”, sostiene el cardenal.
Parolin confesó en una entrevista a Il Corriere della Sera que “la visita, en consideración a las invitaciones formuladas por las autoridades civiles y eclesiásticas del país, fue objeto de examen por algún tiempo”. Y además de visitar a Kirill y Putin, se entrevistará con “otros altos representantes del Estado y la Iglesia ortodoxa rusa”. Así, dejó caer la posibilidad de un eventual viaje del Papa al país, aunque no confirmó fechas.
El número dos del Vaticano dice también que la visita obedece al “especial interés de la Santa Sede en la gran Europa del Este, que, además de tener ricas tradiciones culturales y religiosas, tiene un papel que desempeñar en la búsqueda de una mayor estabilidad del continente y una mayor unidad, incluidas las relaciones entre Oriente y Occidente”.
Un estudio de la Universidad de Kentucky, publicado por la revista Nature, concluye que los ateos son más sospechosos de inmoralidad que los creyentes. Tras entrevistar a 3.200 personas de 13 países, el estudio saca a la luz los prejuicios que afectan a los no creyentes en el mundo, según recoge La Croix.
“Hemos descubierto intuitivamente que la gente piensa que los graves actos inmorales son más propensos a ser cometidos por ateos que por personas de fe” expone Will Gervais, profesor de Psicología de la Universidad. Y añade: “Esto da fe de una sospecha profundamente arraigada sobre la moralidad de los ateos y la intuición generalizada de que la religión es un componente necesario de la moralidad”.
Los participantes en el estudio han sido sometidos a una prueba psicológica llamada “conjunción de error”. Los investigadores presentaban a un torturador de animales en su juventud que hoy se había convertido en un asesino en serie. Y la pregunta era clara: ¿Consideras que cree en Dios? La mayoría tiene claro que no cree en ningún Dios. Y lo sorprendente es que hasta los que se declaraban ateos comparten la opinión, como explica Gervais.
El obispo de Bangassou (República Centroafricana), Juan José Aguirre, tras un ataque en el que han asesinadas 50 personas: “Estamos muy preocupados. Ha sido una masacre, han degollado a hombres y niños”. Los supervivientes están ahora acogidos cerca de la catedral, en un campo de desplazados, como se explicaba a través de unos mensajes de WhatsApp que pronto se hicieron virales.
En declaraciones a COPE, recogidas por Europa Press, Aguirre ha asegurado que durante los ataques, “más de 500 musulmanes” estaban metidos “como sardinas” en la mezquita escondiéndose de los radicales. Y es que el misionero intenta proteger a más de 2.000 musulmanes desplazados en medio de una guerra de guerrillas entre las milicias que actualmente se encuentran enfrentadas en la ciudad, anti-balakas y selekas.
“Nosotros nos poníamos delante de la mezquita a pecho descubierto y con las manos arriba, pidiendo que no tiraran más y diciéndoles que se estaban manchando las manos de sangre”, ha relatado. Preguntado sobre si hay alguna posibilidad de que el conflicto armado se calme en próximas fechas, se muestra pesimista: “Las armas siguen llegando de los países del golfo, los grupos más radicales yihadistas siguen entrando en el centro de África como quieren. Es muy difícil que lleguemos a la paz, a la cohesión social y al entendimiento si una parte está continuamente alimentando el odio y la intransigencia”.