El papa Francisco llegará a Myanmar el 27 de noviembre y a Bangladesh el día 30 en lo que será su nueva gira asiática. Así lo ha anunciado la agencia de noticias católica Ucanews, a partir de las declaraciones las autoridades eclesiales y gubernamentales que están preparando en ambos países la visita del Pontífice.
Sin el programa cerrado definitivamente, los organizadores prevén que el Papa celebrará dos misas en Myanmar: una en Naypyidaw, donde también se encontrará con el presidente del país, Htin Kyaw, y con la presidenta del Gobierno, Aung San Suu Kyi, y otra al aire libre en Yangon.
En Dhaka, la capital de Bangladesh, Francisco presidirá una misa multitudinaria durante la cual ordenará a 16 nuevos sacerdotes. También está previsto que que se entreviste con varios representes políticos, miembros de otras confesiones religiosa y activistas sociales.
La organización espera que el programa concreto esté definitivamente cerrada a final de este mes.
Relaciones diplomáticas
La gestación de este viaje vino precedida del establecimiento de relaciones diplomáticas entre el Vaticano y Myanmar, después de que en la antigua Birmania fuese elegido, en 2015, el primer presidente civil tras medio siglo de dictadura militar. Hasta entonces, la Santa Sede tenía un delegado apostólico residente en Tailandia.
El establecimiento de esas relaciones diplomáticas fueron aprobadas por el Parlamento del país el pasado mes de marzo y selladas con un encuentro en el Vaticano – el pasado mayo– entre el papa Francisco y Aung San Suu Kyi (en la foto), la política birmana que sufrió prisión domiciliaria durante los años de la dictadura y a la que le fue concedido el Nobel de la Paz en 1991, cuando permanecía recluida en su casa.