Hasta los últimos momentos de su estancia en Colombia, los medios de comunicación de este país han seguido a Francisco sin abandonarle un solo instante.
Ha sido una cobertura de gran calidad. La Autoridad Nacional de Televisión (ANTV) ha proporcionado excelentes imágenes de todas las ceremonias y desplazamientos del Pontífice. Los comentarios, en general, han sido correctos, con algunos errores (como asegurar que el rezo del ángelus fuera de Roma era un acontecimiento excepcional). Puede perdonárseles un excesivo énfasis. La cadena Caracol ha predominado sobre la competencia. Los índices de audiencia han sido muy altos.
Por lo que se refiere a la prensa escrita, destaco la labor de El Tiempo, con información muy completa y numerosos comentarios de escritores y periodistas. No he observado manipulación política destacable, manteniendo un cierto equilibrio entre los partidarios de Santos y los de su rival Uribe.
La sala de prensa instalada en el Hotel Tequendama (Bogotá) ha funcionado muy bien: era amplia y ha acogido presencias importantes, como las del presidente Juan Manuel Santos y la del ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas Echeverri. Algunos colegas han considerado algo escasa la presencia ante los medios de los obispos y del portavoz vaticano Greg Burke.
