La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) hizo un nuevo llamado a la solidaridad para con los más de dos millones de damnificados que dejó en el país el terremoto de 8.2 grados Richter, el pasado 7 de septiembre.
En conferencia de prensa este jueves, monseñor Alfonso Miranda Guardiola, Secretario General de la CEM, leyó un comunicado firmado por el presidente del organismo, cardenal José Francisco Robles Ortega.
En el documento recuerda que, como obispos, la tarea principal en este momento es animar en la esperanza acompañada de la oración, fomentar la ayuda solidaria y la responsabilidad social… “Hoy vemos múltiples corazones heridos e innumerables familias sin techo, que no deben quedar en el abandono”.
Los obispos advirtieron que es necesario trabajar todos unidos, iglesias, gobierno y sociedad civil, pues sólo así “lograremos atender no sólo las necesidades más urgentes en todo el país, sino ayudaremos a superar la crisis que este desastre natural ha dejado en el alma; apoyaremos la reconstrucción material y el fortalecimiento personal”.
“Es reconfortante saber que como mexicanos siempre estamos dispuestos a ayudar al que sufre”, por lo que –indicó– las formas de colaborar son llevando víveres a los centros de acopio dispuestos por Cáritas Mexicana o realizando una aportación económica a los números de cuentas de la Comisión Episcopal para la Pastoral Social (CEPS), o de las diócesis afectadas.
Hay prioridades
A pregunta expresa de los reporteros de la fuente religiosa sobre la situación de destrucción que guardan los templos, principalmente en Chiapas y Oaxaca, Miranda Guardiola explicó que muchas de éstas datan del siglo XVI, XVII y XVIII y, por seguridad, algunas de ellas han sido cerradas: “Esperamos que sean reconstruidas, después de atender la prioridad que, en estos momentos, son nuestros hermanos afectados”.
Dijo que los obispos han priorizado la ayuda a las diócesis más lastimadas que son: la Arquidiócesis de Antequera Oaxaca, la Diócesis de Tehuantepec (Oaxaca), la Diócesis Tapachula (Chiapas), y la prelatura de los Mixes.
No obstante, reconoció que hasta el momento no ha sido posible cuantificar todos los daños, ya que existen factores como los derrumbes, que mantienen muchas poblaciones incomunicadas, así como las réplicas de los temblores, que no han cesado”.
En este contexto, el Secretario Ejecutivo de la CEPS de la CEM, padre Rogelio Narváez Martínez, hizo un recuento de las acciones que ha realizado este organismo en las zonas más afectadas por el sismo.
Destacó particularmente la colecta nacional a la que convocó un día después del sismo, gracias a la cual se han recabado 200 toneladas, principalmente de alimento, así como un millón y medio de pesos.
De igual forma, mencionó que Cáritas Seúl ha dispuesto para la reconstrucción y rehabilitación un donativo de 50 mil dólares.
Finalmente, aseguró que en este momento, sin desatender la emergencia, CEPS ya trabaja en el diseño de la estrategia de reconstrucción, que dará inicio este 15 de septiembre, gracias a la ayuda económica de la Iglesia en México, pero al mismo tiempo se pedirá la ayuda de las Cáritas de otras naciones. En un primer momento se trabajará en la diócesis más afectada, que fue la de Tehuantepec, a cargo de monseñor Óscar Armando Campos Contreras.
Si desea donar:
Cáritas Nacional:
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A nombre de: Cáritas Mexicana I. A. P.
Número de cuenta: 0123456781.
CLABE interbancaria: 012 180 00123456781 5