El papa Francisco recibió el jueves 19 de octubre a un grupo de estudiantes de Economía de la prestigiosa ‘Institution des Chartreux’ de Lyon, en Francia. Lo primero de todo, se ha mostrado alegre de que dicha institución complemente la formación académica de su alumnos con una “fuerte dimensión humana, filosófica y espiritual”, ya que se trata de un centro católico. Ha tildado de esencial que los futuros empresarios “puedan ser libres de la tentación del culto al dinero (…) y adquieran valor para no obedecer ciegamente la mano invisible del mercado”
En un momento dado en el que el Papa estaba recordando a los asistentes que en Roma muchos hombres han dejado una gran huella en la historia, les ha asegurado que ellos también pueden dejarla: “De hecho, tenéis la capacidad de decidir vuestro futuro. Quiero repetirlo: vosotros tenéis la capacidad de decidir vuestro futuro”.
De esta forma el Pontífice ha insistido en que es cada hombre el que elige lo que hace en su vida, y no debemos dejarnos guiar por la sociedad o la masa. “Por eso os insto a que seáis responsables respecto a este mundo y a la vida de cada uno de los demás hombres”, ha continuado.
“A pesar de que todo el mundo espere que luchéis por el éxito, tomaos tiempo para recorrer el camino de la fraternidad, para tender puentes entre los hombres en lugar de muros. (…) Os aliento a que trabajéis por el bien, a convertiros en la semilla humilde en un mundo nuevo”. “Sed fuertes para no obedecer ciegamente a la mano invisible del mercado”, añadió.
Tras este discurso les ha agradecido nuevamente su viaje hasta Roma y les ha bendecido a ellos y a la ‘Instituion des Chartreux’.
