América

Escuelas de Perdón y Reconciliación: diez años construyendo paz en América Latina

  • Santo Domingo celebró el V Encuentro Internacional de la Red de Escuelas de Perdón y Reconciliación
  • Un total de 270 líderes de 19 países se reunen para diseñar estrategias para “desactivar la violencia”





La Red de Escuelas de Perdón y Reconciliación (ES.PE.RE.), uno de los programas de mayor incidencia a favor de la paz a nivel de América Latina, liderado por la Fundación para la Reconciliación –con sede en Colombia–, llega a su décimo aniversario con una significativa presencia en 19 países del continente y a nivel mundial, donde actúan 1.950 líderes y 2.500 voluntarios en 400 ciudades o municipios.

Aproximadamente dos millones de personas se han beneficiado de la propuesta pedagógica de las ES.PE.RE., donde los participantes buscan superar experiencias de dolor y sentimientos de rencor y venganza, a partir de una estrategia metodológica psicosocial y política, inspirada en los valores del Evangelio, en la que cada víctima asume un rol activo que le permite constituirse en co-creadora de paz.

Encuentro Internacional

En el marco de la celebración de su primera década, la Red realizó en Santo Domingo (República Dominicana) el V Encuentro Internacional de las ES.PE.RE. (entre el 12 y el 15 de octubre), con el propósito de acrecentar los conocimientos que sobre el perdón tienen sus miembros activos y fortalecer herramientas metodológicas de acompañamiento, generando, a su vez, enlaces y redes de acción entre los países, y visibilidad hacia los organismos gubernamentales e internacionales que trabajan en la construcción de paz.

De acuerdo con el sacerdote Leonel Narváez Gómez, presidente de la Fundación para la Reconciliación, “la actual coyuntura mundial, cada vez más crispada por polarizaciones y odios, obligan a construir relaciones que valoren y respeten la dignidad del otro, que practiquen el cuidado, la bondad y la inclusión, en otras palabras, esa realidad demanda cultura política y ciudadana del perdón y la reconciliación”.

Desactivar la violencia, activar la paz

Priorizar programas de prevención que respondan a la múltiple causalidad de la violencia, también hace parte de la tarea que desarrolla la Fundación para la Reconciliación, desde hace diez años, a través de las ES.PE.RE. En este sentido, las Escuelas de Perdón y Reconciliación se convierten en un valioso ejercicio de prevención, “desactivando la violencia, activando la paz”, como reza su eslogan.

“Reconociendo la urgente necesidad de promover una transformación estructural en América, el tema que nos ha convocado en esta ocasión ha sido ‘el perdón a sí mismo’ como una herramienta renovadora y transformadora, capaz de desactivar las violencias personales, sociales y estructurales”, ha dicho el presidente de la Fundación para la Reconciliación y fundador de las ES.PE.RE., refiriéndose al contenido del V Encuentro Internacional.

“El perdón a sí mismo” y “la espiritualidad del perdón”, en efecto, fueron algunos de los tópicos abordados por los conferencistas internacionales invitados al encuentro de la Red ES.PE.RE., entre quienes se encontraban la psicoterapeuta Robin Casarjian, directora de la Fundación LionHeart (Estados Unidos), y el jesuita Elías López, de la Universidad de Comillas (España).

De igual forma, se compartieron experiencias significativas y se desarrollaron algunos talleres vivenciales en torno a varios de los ejes temáticos clave para la promoción de una cultura de paz: pastoral, penal, perdón y justicia restaurativa, niñez, adolescencia y juventud, parejas, entre otros. El último día del encuentro se dedicó a la definición del Plan de Acción de la Red ES.PE.RE. para los próximos dos años.

El ‘rostro femenino’ del perdón y la reconciliación

En la eucaristía de clausura, celebrada en la Catedral Primada de América en Santo Domingo, el padre Leonel Narváez subrayó el ‘rostro femenino’ del perdón y la reconciliación, toda vez que de los 270 participantes del V Encuentro Internacional, el 85% eran mujeres: “El futuro de la humanidad es ciertamente femenino”.

Asimismo, el sacerdote colombiano –abanderado de la cultura de paz–, haciendo un balance del Encuentro, ha dicho que “se están extinguiendo los conquistadores que con ejércitos, armas e infligiendo mucho dolor, doblegan y someten a las personas, se está acabando esta horrible noche de la humanidad –noche de los últimos 4.000 años por decir lo menos– y se anuncia, aunque sea solo con los susurros de pequeños grupos como este, la aurora de una civilización nueva, de la convivencia, de la compasión y, sobre todo, del perdón”.

Compartir










El Podcast de Vida Nueva