Cuando se cumplen 28 años del asesinato de seis jesuitas de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) de San Salvador –cinco españoles y uno salvadoreño–, perpetrado por los Escuadrones de la Muerte, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos ha confirmado la extradición a España del excoronel y exviceministro de Seguridad Pública, Inocente Orlando Montano, una de las ‘piezas claves’ del crimen, acusado de “cargos de asesinato terrorista”.
Montano era miembro del grupo de oficiales que colectivamente ordenó la masacre de los ‘mártires’ de la UCA, perpetrada en la madrugada del 16 de noviembre de 1989, cuando fueron ejecutados con sevicia los españoles Ignacio Ellacuría, Segundo Montes, Ignacio Martín Baró, Juan Ramón Moreno y Amando López, y el salvadoreño Joaquín López López, así como la empleada Elba Julia Ramos y Celina, su hija de 16 años. Sin embargo, hasta la fecha, el único exmilitar detenido es Guillermo Alfredo Benavidez, condenado en 1992 a 30 años de cárcel.
De ahí que el respaldo del presidente de la corte, John Roberts, a la petición de España de extraditar a Montano, tras rechazar un recurso en su defensa, como recoge El Mundo, pone fin a un proceso que inició en 2011, tras la solicitud del juez de la Audiencia Nacional española, Eloy Velasco, y que recibió la aprobación de la jueza estadounidense Kimberly Swank el 4 de febrero de 2016, la cual, sin embargo, no se concretó hasta el 21 de agosto de este año, cuando la justicia estadounidense dejó sin fundamento un procedimiento jurídico conocido como habeas corpus, en el que se cuestionaba sus condiciones de detención.
“La entrega a España puede realizarse en cualquier momento, puesto que no cabe recurso contra la decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos y, además, el Departamento de Estado ya ha firmado una orden para permitir el envío de Montano a España”, indicó a Efe un portavoz de la diplomacia estadounidense.
Como lo había referido Vida Nueva al anunciar el desbloqueo de su extradición a España, el pasado mes de agosto, Montano cumple una condena en una prisión del estado de Carolina del Norte, en los Estados Unidos, tras haber sido detenido en 2011 por fraude y perjuicio al mentir sobre su situación migratoria, presuntamente para evitar volver a El Salvador para enfrentarse a la justicia de su país.
Por otra parte, el mismo día que Estados Unidos desbloqueó la extradición de Montano, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador ratificó que el pedido de extradición de otros exmilitares vinculados con la matanza de los jesuitas de la UCA no era procedente, y frenó la captura de 13 militares requeridos por la Audiencia Nacional de España.