Las peregrinaciones son un signo muy arraigado en el pueblo mexicano, el cual debe ser vivido de forma consciente y con la claridad en su significado, pues “no se trata sólo de caminar, danzar y rezar, sino también de estar atentos al mensaje que Dios nos envía, y que quiere que nosotros compartamos con quienes nos rodean”.
Este es el mensaje del arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, de cara a las fiestas guadalupanas, que cada año convocan a miles de peregrinos en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe en esa arquidiócesis norteña.
Tras recordar que una de las formas en que tradicionalmente se manifiesta la fe de los mexicanos, especialmente en esta temporada, son las peregrinaciones, Cabrera López explicó que éstas deben ser entendidas como un recuerdo de nuestro “perenne caminar hacia el encuentro del Señor”.
Dijo que todo miembro de la Iglesia debe aprender a vivir en una constante renovación, y en este sentido, “los signos de los tiempos nos hablan de la importante tarea que tenemos los cristianos en la proclamación del Evangelio, siendo testigos vivos que compartan al mundo la alegría de la fe”.
El Arzobispo también hizo un llamado a los fieles que peregrinarán hacia el Santuario de Guadalupe, ubicado en el área metropolitana de la ciudad, a que sean los primeros en dar ejemplo del respeto hacia la ciudadanía.
“Muchos quisieran –explicó– que las peregrinaciones pudieran realizarse como hace años, cosa que ya no es posible. El crecimiento de nuestra ciudad hace cada día más difícil el que los peregrinos puedan desplazarse por las avenidas como sucedía en el pasado. Los tiempos cambian y, debemos aprender a convivir con las nuevas formas que el desarrollo nos propone”.
Por ello, pidió a los peregrinos acatar las indicaciones que las autoridades viales han dispuesto, demostrando que este acto de fe es una invitación a caminar juntos, y viviendo la paz anhelada en esa ciudad. “Hagamos que esta tradición se adapte dócilmente a las nuevas formas de vida en nuestra gran ciudad”, dijo.
Cabrera López también agradeció el apoyo que los elementos de tránsito y vialidad ofrecen a los peregrinos para cuidar su integridad, e invitó a los caminantes a responder con caridad a este servicio que brindan las autoridades.
Finalmente, al hacer referencia a la I Jornada Mundial por los Pobres, que celebró la Iglesia el pasado 19 de noviembre, el arzobispo exhortó a los regiomontanos a realizar todos los días un acto de misericordia a favor de los más necesitados, “siendo conscientes de la importancia que tiene el estar siempre dispuestos a socorrerles en cuanto sea indispensable para su sano desarrollo en la vida”.
Al día de hoy, en el Santuario de Guadalupe hay registrados más de mil grupos de peregrinos, por lo que, de acuerdo con las autoridades del templo, este año se espera un incremento en el número de fieles que visitarán la imagen de la Virgen de Guadalupe en la localidad.