Reportajes

La (r)evolución de la Vida Consagrada

  • La Santa Sede tiene previsto publicar antes de final de año tres instrucciones que reforman aspectos de la vida religiosa, ha podido confirmar Vida Nueva
  • Las congregaciones tendrán que auditarse, los monasterios deberán federarse y se regulará a las vírgenes consagradas
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Evolución y revolución. La Vida Consagrada se reforma para adaptarse al mundo de hoy y clarificar su ser y hacer. Todo está a punto en la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCSVA), donde el trabajo no cesa. Tras hacer las pertinentes aclaraciones, Francisco ya ha dado luz verde a tres instrucciones que se espera que estén publicadas antes de final de año –o al menos con fecha de 2017, puesto que luego están a expensas de las traducciones en los múltiples idiomas–.

Lo confirma a Vida Nueva el secretario de dicha congregación, José Rodríguez Carballo. El franciscano ha visitado España para clausurar la Asamblea General de CONFER, celebrada en Madrid del 13 al 15 de noviembre.

En ella, tras las preguntas en privado de un religioso sobre una instrucción en relación a la gestión de bienes por parte de los consagrados –que ya prometía en agosto de 2014 la carta circular ‘Líneas orientativas para la gestión de los bienes en los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica’–, le animó a hacerlo a viva voz para dar la exclusiva a todos los superiores mayores presentes en el evento.



Los borradores de los textos están en Santa Marta desde el pasado 23 de octubre y, cuando no ha pasado ni un mes, ya tienen el visto bueno. “Hay una instrucción sobre las líneas orientativas para la gestión de bienes económicos. Luego hay una instrucción para las contemplativas, que trata de aplicar los principios que aparecen en la constitución apostólica Vultum Dei quaerere. Y vamos a sacar un tercer documento sobre el Ordo Virginum”, explica a esta revista el religioso ya de vuelta a Roma.

Y es que no se trata de producir por producir: “Estamos trabajando con varios documentos a la vez, pues el peligro es quedarnos contemplando situaciones que hoy pueden tener solución, pero tal vez mañana no”, reconoce.

Los tres documentos

  • 1. Las congregaciones tendrán que auditarse. El Vaticano quiere que los institutos se auditen, en aras de la transparencia que propugna Francisco. Y en ello lleva trabajando tres años. La CIVCSVA ha organizado dos simposios internacionales sobre la gestión de bienes. A raíz del primero, celebrado en 2014, se publicó la carta circular ‘Líneas orientativas para la gestión de los bienes en los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica’. “Esta carta provocó la inquietud en provinciales y ecónomos, ante las exigencias que se planteaban, porque más que unas orientaciones parecía una instrucción”, indica un religioso experto en Derecho. Tras tres años de espera, ahora podrán, por fin, ponerse manos a la obra para cumplir el mandato. (…)
  • 2. Los monasterios deberán federarse. La constitución apostólica Vultum Dei quaerere –publicada el 22 de julio del año pasado– dice textualmente: “En principio, todo monasterio tendrá que ser federado”. Un consejo entonces en el que se insiste en la instrucción que viene a suplir a la anterior –’Verbi Sponsa’ (Juan Pablo II, 1996)–. “Una de las tentaciones que pueden tener los monasterios de vida contemplativa es precisamente el aislamiento, porque son autónomos sui iuiris. Si esa autonomía no se vive bien, fácilmente desemboca en un aislamiento donde incluso es más fácil la manipulación de las hermanas”, explica a Vida Nueva José Rodríguez Carballo. (…)
  • 3. Las vírgenes consagradas serán reguladas. La Ordom Virginum es un tipo de consagración que se restableció tras el Concilio Vaticano II. Desde entonces, permanece sin regularización. Ahora, la CIVCSVA quiere, a través de una instrucción, clarificar su identidad y ofrecer guías a los obispos sobre cómo acoger y acompañar esta realidad. Las vírgenes consagradas no viven en comunidad ni tienen superiora. Su superior es el obispo, del que reciben la ordenación. “Es una vocación en sí misma e individual, lo que la distingue de otras formas de vida consagrada. No es un refugio para mujeres que no hayan encontrado su sitio en otras formas de séquela christi”, reconoce a esta revista el secretario de la CIVCSVA. Por tanto, “esta instrucción de lo que trata es de poner un poco de orden”. (…)
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