La Diócesis de Barbastro-Monzón celebra que el Gobierno haya decidido devolver a Aragón los bienes de Sijena. Pese a que la Generalitat se negaba a entregar las 44 piezas, aunque así lo había determinado la Justicia, la aplicación del artículo 155 de la Constitución otorgaba al Gobierno español la potestad para decidir cumplir con la sentencia judicial. El obispo de Barbastro, Ángel Pérez Pueyo, anunció ayer, 28 de noviembre, su intención de presentar la demanda para reclamar los materiales depositados en el Museo de Lérida. Con esta acción, la Diócesis “no persigue otra cosa que justicia”, reconoce en un comunicado recogido por El Periódico.
El ministro de Cultura, Iñigo Méndez de Vigo, como conseller en funciones, dio orden ayer de acatar la sentencia del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Huesca para entregar “inmediatamente” a Aragón los bienes de Sijena y poner fin a un conflicto que cumple dos décadas. En este sentido, el prelado, “aprovechando la coyuntura política”, tiende públicamente la mano al Ministro para que pueda mediar en este conflicto, y se pueda “poner fin al litigio que tanto desgaste ha venido produciendo, más aún cuando nos asiste en derecho la reivindicación de los bienes cuya restitución se pretende”.
El prelado también recordó que “no podemos pretender una tutela de jueces y tribunales si esta no es efectiva, de acuerdo con el artículo 24 de la Constitución Española. Efectividad que solo se logra cuando se da cumplimiento íntegro a las resoluciones judiciales”. Además, el obispo dio la enhorabuena a las hermanas sanjuanistas, propietarias del Monasterio de Villanueva de Sijena a quienes pertenecen los bienes artísticos, “lo cual hacemos extensible al equipo jurídico que tanto ha venido haciendo por la restitución efectiva de los bienes religiosos reclamados”.
Una talla de Cristo del siglo XVIII con sorpresa
Los restauradores de una talla del siglo XVIII localizada en la iglesia de Santa Águeda, ubicada en el municipio burgalés de Sotillo de la Ribera, han viajado en el tiempo al descubrir, oculta en el interior de la obra, una cápsula del tiempo con información económica, religiosa, política y cultural de la época, según pública El Mundo.
Los trabajos han sacado a la luz un documento fechado en 1777 y firmado por el capellán de la catedral del Burgo de Osma, Joaquín Mínguez, que identifica al autor de la talla –Manuel Bal– y aporta detalles sobre el momento en que se encontraban, por ejemplo, sobre las cosechas, las enfermedades más comunes o las actividades de entretenimiento. En concreto, se trata de dos pliegos que los restauradores encontraron al quitar la pieza del paño que cubre las nalgas.
Según ha explicado a Efe el historiador Efrén Arroyo, miembro de la Cofradía de la Semana Santa de Sotillo de la Ribera, promotora de la restauración de esta talla, este hallazgo es sorprendente y singular porque “si bien es usual que muchas esculturas estén huecas, no lo es tanto encontrar en su interior unos documentos escritos a mano”. Estos pliegos han sido enviados al arzobispado, pero se ha guardado una copia dentro del Cristo para que lo puedan descubrir generaciones futuras.
Disculpas a sacerdote falsamente acusado de abusos
La Red de Supervivientes de Abuso Sexual por Sacerdotes (SNAP, por sus siglas en inglés) ha emitido un comunicado para pedir disculpas por “cualquier declaración falsa o inexacta” contra el P. Xiu Hui “Joseph” Jiang, falsamente acusado de abuso sexual de una menor. Así lo público la Arquidiócesis de St. Louis, a la que pertenece el cura, en su sitio web el pasado 27 de noviembre, según explica Catholic News Agency.
El P. Xiu Hui “Joseph” Jiang fue acusado de contacto impropio con una adolescente que asistía a la Basílica de St. Louis, donde él era párroco asociado. Las denuncias criminales interpuestas contra el sacerdote fueron rechazadas en 2015, incluso tras someterse a una prueba poligráfica. SNAP asegura que sus dirigentes “nunca quieren ver a nadie acusado falsamente de un crimen”.
En este sentido, la red se disculpa por “cualquier declaración falsa o inexacta relacionada a las denuncias contra el P. Joseph Jiang”. La Arquidiócesis, por su parte, explicó en un comunicado que la disculpa fue emitida “como parte de un acuerdo con SNAP en una demanda por difamación interpuesta por el Padre Jiang en 2015” contra los responsables de la asociación y la familia de la menor.