Este viernes 1 de diciembre concluyó en Madrid el Congreso Internacional Salesiano de Pastoral Juvenil y Familia SYMFAMILY17, que se ha celebrado desde el pasado lunes y que ha reunido a más de 300 agentes de pastoral vinculados al mundo salesiano. A lo largo de toda la semana, ponencias, presentación de experiencias y temas de estudio se han sucedido para ofrecer una visión positiva de la realidad de la familia, como reto y oportunidad para la pastoral juvenil. Este encuentro ha servido para orientar el trabajo de la congregación en la pastoral familiar, en armonía con su propuesta carismática para los jóvenes.
La clausura se celebró en la Casa salesiana ‘San Miguel Arcángel’, en la zona del Paseo Extremadura de Madrid. Tras la eucaristía, celebrada en el templo parroquial de la presencia, presidida por Ángel Fernández Artime, Rector Mayor de la congregación, los asistentes participaron en un acto festivo en el teatro del centro.
El superior recalcó que “el espíritu de familia, propio del carisma salesiano, y la misión compartida con los laicos, deben ser una apuesta firme para nuestra acción educativa y evangelizadora con los jóvenes y las familias”.
Sujetos de la acción pastoral
En las conclusiones de los participantes se ha destacado que la familia no es solo objeto, sino también sujeto de la acción pastoral. Se ha subrayado la necesidad de potenciar la formación de salesianos y laicos en el acompañamiento de los jóvenes hacia el matrimonio, así como la importancia de que en la formación de los futuros salesianos se incluya aspectos específicos sobre cómo acompañar a las familias.
Además, se ha insistido en la necesidad de involucrar más a los padres en la pastoral juvenil, en prestar más atención a la educación afectiva y en crear redes de soporte para las familias que tienen momentos de crisis.
Una familia interviene en el acto de clausura
Familias, corresponsables en la misión
El la última de las ponencias el salesiano Rossano Sala, Secretario especial del Sínodo para los jóvenes, explicó destacó la continuidad entre dos iniciativas significativas del Papa Francisco: los sínodos de la Familia y el próximo sobre los jóvenes. Para él “es decisivo revisar la pastoral juvenil a partir del espíritu de familia”, como una propuesta específica de la pastoral con estilo salesiano.
El profesor Sala, que es también director de la revista especializada ‘Note di Pastorale Giovanile’, el espíritu de familia “es una dimensión transversal de toda pastoral salesiana”.
En este sentido recordó las palabras de Benedicto XVI a los salesianos en 2008: “En la educación de los jóvenes resulta extremadamente importante que la familia sea un sujeto activo. La predilección y el compromiso por los jóvenes, que caracterizan el carisma de Don Bosco, deben traducirse en un compromiso análogo por la implicación y la formación de las familias. Por eso vuestra pastoral juvenil debe abrirse con decisión a la pastoral familiar”, recalcó.
También subrayó la importancia de considerar a las familias como corresponsables de la misión salesiana y concluyó señalando que “no queremos una pastoral familiar paralela a la pastoral juvenil”.
En la jornada del jueves se incorporó al congreso Raúl Tinajero Ramírez, director del Departamento de Pastoral de Juventud de la Conferencia Episcopal.
Buenas prácticas
Un momento importante del congreso ha sido la presentación de “Buenas Prácticas”, experiencias que ya se están realizando en diferentes partes del mundo centradas en el trabajo pastoral con familias. Han pasado por el congreso experiencias de todo tipo, como el trabajo en Chennai (India) para la integración de jóvenes con HIV; los centros de atención a familias en Bratislava, o la Alianza educativa para acompañar a familias y jóvenes de Turín, diferentes experiencias de formación de padres en New Rochelle (Estados Unidos), Dingi (Malta) o Macao (China).
También las españolas “Pastoral en Zapatillas”, itinerario y fichas de vida cristiana para las familias o el trabajo con grupos de padres de Madrid.
Un fruto de este congreso es el grado en “Pedagogía para la Formación a la vocación matrimonial y familiar”, que se desarrollará en la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Salesiana de Roma. El grado, según explicó el profesor Mario Oscar Llanos, que quiere formar a agentes de pastoral para acompañar a los jóvenes en la vocación laical a la familia y al matrimonio, para formar a “artesanos de la acogida, del discernimiento, del acompañamiento”, explicó.
