Patriarca caldeo: “Estados Unidos es responsable moral de la situación de los cristianos en Irak”

Patriarca caldeo: “Estados Unidos es responsable moral de la situación de los cristianos en

Luchar contra la mentalidad extremista. Esa es la receta del patriarca caldeo, Louis Raphael Sako, para la coexistencia pacífica entre los grupos étnicos y religiosos de Irak tras el fin de la ocupación del autodenominado Estado Islámico. Y así lo ha expresado en una entrevista a AP, recogida por The Washington Post. “Todos somos hermanos, tenemos que respetarnos mutuamente más allá de nuestra religión o etnia”, añadió.

Sako también hizo un llamamiento para que se ponga fin a la discriminación contra los cristianos en Irak y para la reconstrucción de las zonas cristianas en el norte del país (provincia de Nínive) en ruinas por la guerra. Y es que la reconstrucción permitiría el regreso de las familias cristianas, expresa el prelado. La realidad es que de los 1,5 millones de cristianos que había en 2014 hoy solo permanecen en la zona medio millón. La mayoría ha abandonado el país y más de 120.000 han sido desplazados a otros puntos de Irak “gracias a la ayuda de la Iglesia”, porque “el Gobierno no ha dado nada”, crítica.

Sobre la mentalidad extremista, el patriarca mantiene que “tienen la sensación de que el Islam es la culminación de la religión, es la única religión verdadera y las demás han sido falsificadas”. Y los cristianos se sienten aquí “marginados”. Por eso, “ahora, lo que esperamos del Gobierno y también de la comunidad internacional, especialmente de Estados Unidos que son responsables morales de lo que hemos vivido aquí los últimos 15 años tras la invasión en 2003, es garantías a la seguridad y estabilidad, también la reconstrucción de los pueblos”, puntualizó.

Trump hecha “gasolina al fuego” de Oriente Medio

La decisión de Trump de reconocer formalmente a Jerusalén como capital de Israel está añadiendo “gasolina al fuego” de los conflictos en Oriente Medio y “va en contra de los acuerdos internacionales”. Lo dice el arzobispo Silvano Tomasi, ex enviado de la Santa Sede a las Naciones Unidas en Ginebra, en una entrevista con The Tablet. Mientras el Rey de Jordania, Abdullah II, se reunía ayer, 19 de diciembre, con el papa Francisco en el Vaticano para tratar la cuestión, la revista británica conversaba con el diplomático.

El prelado mantiene que “la única posibilidad de paz era renovar el esfuerzo por encontrar una solución de dos estados para Israel y Palestina que respetara los acuerdos internacionales”, porque “la comunidad internacional ve a Jerusalén como un centro religioso y político que trasciende su papel de un solo Estado”, dijo.

Según Tomasi, “la decisión unilateral tomada por la actual Administración de los Estados Unidos se desvía de la posición aceptada por la comunidad internacional y se convierte en una fuente de tensión en una región donde los conflictos ya abundan”. Y continuó: “La complejidad de Oriente Medio hace que la paz parezca una ilusión, pero el desaliento no es la respuesta”. Por ello, llama a la Iglesia y a la comunidad internacional a “un diálogo renovado”.

El Vaticano reconoce las virtudes heroicas de Wyszyński

La Santa Sede reconoce las virtudes heroicas del cardenal Stefan Wyszyński. El ex primado de Polonia, íntimo amigo de san Juan Pablo II, ha sido reconocido como “un padre de la Patria”, por guiar al país durante la ocupación y las persecuciones del comunismo contra los cristianos a causa de su fe.

El primado de Polonia durante 33 años, hasta su muerte en 1981, comienza su camino hacia la beatificación, deseada y puesta en marcha por Karol Wojtyla en 1989, pero que quedó en suspenso durante muchos años. Según ha reconocido a Vatican Insider el presidente de la Conferencia Episcopal de Polonia, Stanislaw Gadecki, se trata de “un paso decisivo”.

“El proceso –explicó Gadecki– demostrará con una luz mucho más plena sus méritos para la Iglesia y para Polonia”. El cardenal, quien estuvo encarcelado, fue nombrado por Pío XII en 1952, pero se le impidió ir a Roma a recibir su birreta. En el primer cónclave de 1978, en el que salió elegido Juan Pablo I, fue considerado como uno de los ‘papables’.

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