Cardenal Ravasi: “El cristianismo no es una secta, no podemos encerrarnos”

Vivir el cristianismo en diálogo, sin caer en la tentación de encerrarse. Eso es lo que ha pedido el cardenal Gianfranco Ravasi a los sacerdotes de las diócesis del sur de Portugal –Algarve, Beja, Setúbal y Évora– en su jornada anual de formación en la Albufeira. “El cristianismo implica un diálogo que sea verdadero encuentro”, subrayó, según recoge la agencia portuguesa Ecclesia. Y añadió: “El cristianismo no es una secta”.

El presidente del Pontificio Consejo para la Cultura aludió a la superficialidad como “una de las enfermedades de nuestro tiempo”. Por otro lado, y según sus palabras, indicó que la relación entre el cristianismo y la sociedad debe estar marcada por el “optimismo”, precisando que el diálogo es el método “con el que entrar en el mundo”, en “escucha y respeto por el otro”.

Asimismo, el purpurado alentó a los sacerdotes a tener “confianza” en el mensaje cristiano ante el secularismo que azota a Europa. En este sentido, Ravasi recalcó que es necesario “ensuciarse las manos y los pies” para dar vida a la Iglesia en salida de la que habla Francisco.

Los obispos filipinos denuncian “una dictadura progresiva”

Temor a un giro autoritario. Los obispos de Filipinas creen que la reforma de la Constitución planteada por el presidente Rodrigo Duterte lleva a “una dictadura progresiva”. Esa es la principal conclusión que sacan en claro los prelados tras la finalización el pasado 29 de enero de su Asamblea Plenaria, según señala Asia News.

La Conferencia Episcopal Filipina ha pedido a los católicos, a través de unas orientaciones pastorales, estar atentos a los cambios que el presidente quiere aplicar en la Constitución de 1987. Y es que los prelados critican el movimiento político de la administración para la adopción de un gobierno federal y la extensión del mandato de algunas de las más altas oficinas del estado, sin previa consulta popular.

El texto, “animado por la doctrina social de la Iglesia”, muestra la “posición moral clara y franca de los prelados”, que aluden a cuatro principios: dignidad y derechos humanos, integridad y verdad, participación y solidaridad y pensar en el bien común. Unos valores que según ellos están en peligro, porque “las dinastías políticas se están convirtiendo en realidad y concretamente en un factor dominante en la vida política de nuestro país”.

Usar la imagen de Jesús y María en publicidad “no ofende”

El Tribunal de Derechos Humanos ha condenado a Lituania por multar a una empresa que usaba símbolos religiosos para vender ropa, acusada de “haber ofendido la moral pública”. Por tanto, el país tendrá que reembolsar a la compañía los 580 euros de multa que le impuso, según explica La Repubblica. Así lo ha decidido el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que legitima y defiende el uso de símbolos religiosos en la publicidad.

Los hechos se remontan a 2012, cuando una empresa de ropa lanzó una campaña publicitaria con la foto de Jesús –con vaqueros y tatuado– y María –con un vestido blanco y un rosario– acompañado de frases como estas: “¡Jesús, qué pantalones!”, “Querida María, ¡qué vestido!” o “Jesús y María, ¿qué te pones?”.

Según el tribunal, la condena de la justicia lituana violaba el derecho a la libertad de expresión de la empresa textil, pues las fotografías “no son ofensivas o profanas ni incitan al odio por razones de fe, ni atacan a una religión de manera gratuita”; mientras, la Conferencia Episcopal de Lituania sigue creyendo que el anuncio no respeta la fe cristiana.