José Saúl Grisales Grisales sustituirá a Arturo de Jesús Correa Toro en la diócesis de Ipiales, mientras que Mario de Jesús Álvarez Gómez asumirá la diócesis de Istmina-Tadó, tras el traslado de su obispo, Julio Hernando García Peláez, a la diócesis de Garagoa
La oficina de prensa de la Santa Sede ha informado este 3 de febrero algunas novedades en el episcopado colombiano referidas, concretamente, al nombramiento de dos nuevos obispos para las diócesis de Ipiales e Istmina-Tadó.
Con la aceptación de la renuncia del obispo de Ipiales, Arturo de Jesús Correa Toro, Francisco ha nombramiento como sucesor a José Saúl Grisales Grisales, quien se venía desempeñando como vicario de la diócesis Sonsón-Rionegro desde el año pasado.
El padre Grisales, antioqueño, tiene 53 años de edad. Recibió la ordenación sacerdotal en Sonsón el 12 de noviembre de 1989. Su formación filosófica y teológica la cursó en el Seminario Nacional ‘Cristo Sacerdote’, en La Ceja (Antioquia). Es licenciado en teología bíblica y en liturgia de la Universidad Gregoriana (1993) y del Pontificio Ateneo San Anselmo (1997), respectivamente, en Roma.
El nuevo obispo de Ipiales ha sido formador y director de filosofía del Seminario ‘Cristo Sacerdote’ de Yarumal, y rector del Seminario Intermisional y del Seminario Mayor Diocesano ‘Nuestra Señora’. También colaboró en la nunciatura apostólica de Colombia y se desempeñó como párroco de la catedral ‘Nuestra Señora de Chiquinquirá’ en Sonsón.
Por otra parte el nuevo obispo de Istmina-Tadó, Mario de Jesús Álvarez Gómez, perteneciente al clero de Santa Rosa de Osos, desde 2010 había asumido la dirección de las Obras Misioneras Pontificias (OMP). Sucederá a Julio Hernando García Peláez, quien ha asumido la diócesis de Garagoa.
Álvarez, de 56 años, nació en Palmitas, en la diócesis de Santa Rosa de Osos, donde estudió filosofía y teología y se incardinó tras recibir la ordenación sacerdotal el 19 de noviembre de 1985. Es licenciado en teología bíblica de la Universidad Gregoriana (1993).
En su itinerario pastoral ha sido vicario parroquial, párroco y vicario general en su diócesis. De igual forma, se ha desempeñado como profesor y prefecto del Seminario Menor, primero, y rector del Seminario Mayor diocesano, después.
Foto: CEC