Un pueblo rural de Burgos recauda fondos para conservar su parroquia en pie

Los vecinos de Arraya de Oca (Burgos) hacen una colecta para que su parroquia siga en pie

Los edificios históricos no declarados Bien de Interés Cultural se desploman y no hay dinero para conservarlos. Es lo que sucede en Arraya de Oca (Burgos) con la iglesia de Asunción de Nuestra Señora, que está en ruinas desde principios de enero. Levantar de nuevo el templo costará un mínimo de 150.000 euros, según el cálculo más optimista, como relata El Confidencial.

Hay que reconstruir el tejado, que se calcinó en un incendio en diciembre, y la torre del campanario que se ha desplomado a causa del fuego. Dentro de la iglesia aguardan bajo plásticos protectores tres retablos de importante valor. Los vecinos se han puesto manos a la obra. Estos días han desescombrado y han iniciado una campaña para recaudar fondos. 

El Arzobispado de Burgos cuenta con 200.000 euros de presupuesto para reparaciones. Para todo lo demás, dependen de la Diputación de Burgos (400.000 euros del llamado ‘convenio de las goteras’) y de “donativos particulares”, indica Juan Álvarez, director de Patrimonio del arzobispado. La diócesis ha solicitado la custodia de los tres retablos, pero los 22 vecinos se niegan. Sin embargo, Isaac Ayala, párroco de Arraya y de otras 16 parroquias de la comarca, disiente: “No se pueden guardar bienes de tanto valor en un corral cualquiera. Partimos del prejuicio de que si salen, esos bienes no van a volver, pero están documentados y se sabe que pertenecen a esta iglesia”. 

“Gaza está al borde del colapso”

Es la alarma lanzada por la hermana Bridget Thige, nueva directora general de Cáritas Jerusalén: “Gaza está al borde del colapso”. La situación ha empeorado en los últimos meses y las perspectivas para el futuro no son positivas: continúa el bloqueo que transforma la franja en una “prisión al aire libre” de donde es “casi imposible” salir; la crisis energética es aún aguda –solo hay seis horas de electricidad diarias–; faltan los medicamentos esenciales; los recortes salariales de los empleados de la Autoridad Nacional Palestina han exacerbado la situación económica y, ahora, hay temores de que se congelen parte de los fondos estadounidenses a la ONU para los refugiados del territorio.

“La reducción de fondos no solo afectará a los beneficiarios de la educación y la atención médica, sino también a los empleados. Hay miles de personas trabajando para la agencia: maestros, trabajadores sociales, psicólogos. Con el presupuesto reducido, la ONU tendrá que decidir si recortar en educación, sanidad o alimentación”, dice la religiosa, según recoge Asia News.

Según explica la hermana, que ha vivido en Gaza, allí el principal compromiso de Cáritas es la salud, a través de un centro médico fijo y móvil, en particular para niños y ancianos. Ante esta crisis, espera que “haya negociaciones políticas”.

Una misa para 14.000 refugiados en Zambia

El nuncio apostólico en Zambia, Julio Murat, ha pedido a la comunidad internacional que ayude a miles de refugiados actualmente asentados en Kenani Refugee Settlement, en el distrito de Nchelenge. Murat ha celebrado una misa en el centro ante 14.540 refugiados y ha elogiado a ACNUR por brindar apoyo a los refugiados de la República Democrática del Congo.

“La Iglesia en Zambia está profundamente agradecida con ACNUR por su generosidad y humanidad hacia las víctimas del conflicto”, ha declarado Murat. Y ha instado a la comunidad internacional a que “preste la atención que merece a esta crisis y ayude a los refugiados, especialmente a las mujeres y los niños, a satisfacer las necesidades más básicas de su supervivencia”.

El nuncio ha reconocido que “el trabajo de ACNUR en Zambia es de solidaridad con los refugiados y el Vaticano agradece al Gobierno por darles espacio para operar”. Murat también ha asegurado a los más de 14.633 refugiados en los asentamientos de Kenani y Mantapala que la Iglesia siempre estará a su lado y apoyará su situación.

Noticias relacionadas
Compartir