“El ser humano está llamado a servir y a ser feliz; y si puede ser feliz sirviendo, no necesita más”, asegura la presidenta de la Alianza Mexicana de Voluntariado
Susana Barnetche y Pous es presidenta de la Alianza Mexicana de Voluntariado (AMEVOL), una asociación integrada por organizaciones de la sociedad civil y personas que buscan fortalecer el voluntariado. Próximamente estará participando en el 1er. Congreso de Escuela Evangelizadora que se llevará a cabo en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, del 8 al 10 de febrero, con la conferencia: “Voluntarios en el camino. Educar desde las periferias existenciales”.
Con toda una vida dedicada al voluntariado, Susana Barnetche asegura que la mayoría de los voluntarios han decidido serlo, y es que esto algo que se aprende en la infancia –ya sea porque la familia lo practica–, se vive en la adolescencia y juventud, y se concientiza en la vida adulta”.
“El voluntariado más valioso es el que se vive plenamente, desde la conciencia y desde los valores”, afirma categórica quien por más de 40 años fue directora de RENOVACIÓN, una de las organizaciones de voluntariado más importante del país, pues “se trata de una decisión personal que permite orientar las habilidades de la persona al servicio del otro”.
Susana Barnetche asegura que el voluntariado permite a la persona descubrir su propio potencial, “ya que por lo general la mesa no está servida, sino que tiene que derrochar creatividad para la solución todas las situaciones que se van presentando”.
Por ello, consideró que el voluntariado es una oportunidad de crecimiento, “y contra todo lo que se escucha sobre el mismo, es la antítesis del sacrificio: es un gozo. El ser humano está llamado a servir y a ser feliz; y si puede ser feliz sirviendo, no necesita más”, dice.
La Presidenta de la AMEVOL explicó que durante muchos años el voluntariado en México fue silencioso, pero a partir del sismo de 1985 surgieron muchas organizaciones de la sociedad civil que enfocaron sus esfuerzos en diversas actividades para atender todos los problemas derivados del terremoto.
Posteriormente, tras la desaparición del Voluntariado Nacional durante el sexenio del presidente Ernesto Zedillo (1994-2000), “muchas personas que habían probado la dicha de hacer voluntariado”, decidieran constituirse legalmente para continuar con su labor; y a raíz del 2001, Año Internacional del Voluntariado, este tipo de servicio se hizo más patente.
Señaló que más tarde, cuando surgió la figura de la “Empresa Socialmente Responsable” los corporativos se vieron obligados a que sus colaboradores realizaran voluntariado, y éste se hizo aún más visible, incluso, necesario.
“En el 2007 se creó el Premio Nacional a la Acción Voluntaria y Solidaria, otorgado por el Gobierno Federal de Felipe Calderón, a instancias de la entonces primera dama Margarita Zavala, en seguimiento al extinto Premio Nacional al Voluntariado, creado por la Asociación Mexicana de Voluntarios”.
Para Susana Barnetche un evento importante tuvo lugar hace dos años, cuando se llevó a cabo en México la Conferencia Mundial de Voluntariado, promovida por la International Association for Volunteer Effort, y organizada por AMEVOL y el Centro Mexicano para la Filantropía.
Los sismos de septiembre del 2017 volvieron a evidenciar la importancia del voluntariado: “La naturaleza llevó a la ciudadanía a sacar lo mejor de sí, un voluntariado que ya se reclama como una necesidad y que nos obliga a estar mejor preparados y organizados para ser más efectivos y eficientes”.
Agregó: “Curiosamente, cuando todo el voluntariado lo esperaba, el presidente Enrique Peña Nieto no entregó el premio esperado”. Por lo anterior, Susana Barnetche concluye que es muy claro que al Gobierno Federal actual no le interesa el voluntariado, “aunque en su discurso diga lo contrario”.
Cabe mencionar que el 1er. Congreso de Escuela Evangelizadora, en el que participará Susana Barnetche, tiene como objetivo articular esfuerzos para contribuir a la actualización y formación de los responsables de la Pastoral Educativa y educadores católicos, desde una perspectiva humana, con el fin de responder a los desafíos de la educación católica en México. Es organizado por la Confederación Nacional de Escuelas Particulares (CNEP), el Equipo Nacional de Coordinadoras/es de Educación (ENCE), Ediciones SM y Editorial PPC.
Para mayores informes, llamar a Ediciones SM al 1087-8400 Ext. 3412. A la CNEP al 5523-4171, o bien dirigir un correo a ecatolica@ediciones-sm.com.mx. En internet: www.escuelaevangelizadora.com.mx