Reportajes

Proyecto ÖDOS: apoyo a madres y niños en situación de vulnerabilidad

  • En la Jornada Mundial de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas, un proyecto intraeclesial de ayuda
  • La red acompaña a mujeres subsaharianas con hijos o en avanzado estado de gestación





Mujeres subsaharianas, especialmente vulnerables, acompañadas de niños de corta edad o en los últimos meses de gestación: a esta realidad intenta dar respuesta, desde un enfoque de derechos humanos, el Proyecto ÖDOS. Y es que son potenciales víctimas de trata, puesto que su vulnerabilidad las coloca en manos de las redes. De hecho, son mujeres para las que no existe una atención integral.

“La falta de autoidentificación supone que el sistema no atiende a su especial vulnerabilidad y, como consecuencia, los niños que acompañan a estas mujeres carecen de la más mínima protección que podría ofrecer el sistema”, explica a SomosCONFER Isabel Lázaro, profesora de Derecho de la Universidad Pontificia Comillas y una de las impulsoras de esta red. Del mismo modo, añade: “La ineficacia de la respuesta viene siendo reconocida en los últimos años por los responsables del sistema. Basta leer en este sentido las Memorias de la Fiscalía General del Estado”. Pese a ello, “no se producen cambios”.

Red de colaboradores

Como explica Lázaro, el objetivo del programa es crear una red de colaboración entre distintas organizaciones que ofrezca posibilidades a estas mujeres y sus hijos para salir de la esclavitud. Y esto se materializa en dos fases: la primera se basará en la identificación, acogida y restablecimiento de sus necesidades básicas, mientras que la segunda se centrará en el acompañamiento para que cada mujer asistida pueda construirse un futuro digno, libre y seguro en España junto a sus hijos.

Asimismo, el Proyecto ÖDOS también pretende generar un proceso de incidencia social y política. ¿Y por qué se ha visto la necesidad de sumar un nuevo proyecto a la lucha contra la trata? “El conocimiento directo de estas situaciones nos ha llevado a algunas personas a arriesgar en la búsqueda de soluciones proponiendo una articulación en red y utilizando en gran medida recursos ya existentes pero no coordinados”, explica. Y es que “el trabajo en red garantiza que la transición de unos recursos a otros se producirá de forma fluida”.

Recursos existentes no coordinados

En el corazón de este trabajo en red está la Fundación cordobesa EMET-Arco Iris, que ofrece un centro para permitir el restablecimiento y cuidado de las necesidades más inmediatas de las mujeres y los niños –cuyo paradero permanece en el anonimato para una mejor protección de las víctimas–. Y “quienes han estado dispuestos a dar, a arriesgar, a poner de su parte, han sido fundamentalmente congregaciones religiosas, entre ellas: las Esclavas del Sagrado Corazón, las Hermanas Hospitalarias, Villa Teresita, La Merced Migraciones o el Servicio Jesuita a Migrantes.

Su generosidad conmueve realmente”, apunta Lázaro. Sin embargo, ellos no quieren hacerlo solos, por eso, están abiertos a que otras congregaciones presten apoyo; de hecho, en camino están otras colaboraciones con Institutos con el fin de que el proyecto pueda replicarse en distintos lugares de España.

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