Los rohingya no están solos. Pese a llevar varios meses en estado de postración en Bangladesh, hacinados en grandes campamentos para refugiados, los 600.000 miembros de esta minoría islámica que han debido de abandonar a la fuerza la vecina Myanmar están recibiendo el abrazo real de Cáritas.
Y es que, si la delegación bengalí había lanzado un SOS a las Cáritas de todo el mundo, pidiendo 250.000 euros para distintos programas de apoyo sobre el terreno, ya se han recaudado 320.000. Así lo ha hecho público Cáritas Internationalis, que se felicita en un comunicado de que las aportaciones de los donantes “han superado con creces el importe solicitado”. De esa cantidad, hay que destacar que 100.000 euros, un tercio del total, han sido aportados por Cáritas Española.
Primera fase de emergencia
Fue en el pasado septiembre cuando Cáritas Bangladesh cifró en 250.000 euros lo que le costaría poner en marcha una primera fase de acogida con la que “cubrir las necesidades de emergencia”. Ahora, gracias a esta generosa respuesta, se han podido afrontar con todas las garantías los programas de ayuda humanitaria previstos.
“Hasta la fecha –se explica en el comunicado–, Cáritas ha distribuido ayuda alimentaria y productos de primera necesidad a 40.044 familias, artículos de invierno a 14.600 familias, ropa de cama y vestido a 6.456 familias y enseres domésticos a 2.500 familias”.
“Asimismo –se concluye–, Cáritas Bangladesh ha obtenido la aprobación del Gobierno para la instalación de 18 pozos, 18 casas de baños y 40 letrinas comunitarias (200 unidades individuales); distribución de kits de higiene para 6.000 familias, kits de alojamiento para 2.000 familias y productos no perecederos para otras 10.322 familias”. Además, en coordinación con ACNUR, Cáritas está procediendo a la reubicación de 5.000 familias.
Esta primera fase de emergencia se extenderá hasta finales de abril, momento en el que se iniciarán los trabajos para una nueva etapa, ya centrada en una atención más integral y en clave de desarrollo.