Tal como lo anunció el arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa, luego de la sorpresiva inscripción del papa Francisco como primer peregrino de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), este domingo 18 de febrero, durante la celebración del primer Domingo de Cuaresma, en Atalaya (diócesis de Santiago), los obispos panameños, acompañados de algunos jóvenes de sus jurisdicciones eclesiásticas, se inscribieron como peregrinos a la JMJ Panamá 2019, así lo dio a conocer en un comunicado de prensa, Eduardo Soto, director de comunicaciones de este evento.
Para Manuel Ochogavía, obispo de Colón-Kuna Yala y responsable de la pastoral juvenil a nivel nacional, “el mayor reto es abrir nuestros corazones a todos los peregrinos del mundo, teniendo en el corazón a los jóvenes de las periferias sociales y humanas de hoy. En ese sentido, Panamá tiene el reto de convertirse en ese lugar de encuentro. Reconocernos como hermanos, en un espacio de diálogo. También encontrarnos en el camino de la fe y en los ideales que tenemos en común”.
Más de 1.000 grupos de 70 países
El equipo promotor de la JMJ Panamá 2019 anunció que “a esta fecha, han solicitado cupos para la JMJ 1.041 grupos, correspondientes a 42.000 peregrinos de casi 70 países”. Con lo cual, los jóvenes del mundo han atendido el llamado del Papa masivamente.
En el caso de Panamá, la plataforma de registro sumaba 62 grupos para un total de 5.619 peregrinos. Tras su inscripción, el arzobispo de Panamá se dirigió a los jóvenes panameños afirmando que “la juventud hace camino mirando al futuro con esperanza; ustedes son misioneros de Jesús. Los invito a la JMJ 2019 en Panamá, una fiesta donde nos vamos a encontrar con Jesús, de la mano de María, junto al sucesor de Pedro, el Papa Francisco”
“Joven a ti te digo, levántate”
El proceso de inscripción de obispos de Panamá tuvo como telón de fondo la solemnidad de Jesús Nazareno de Atalaya, con lema “Joven a ti te digo, levántate”, “como una invitación para que sean protagonistas de su propia historia y del país, a partir de su participación en la JMJ allí, a fin de propiciar el cambio que la Iglesia universal y el mundo requieren”, señalaron sus organizadores.
Para el obispo de Colón-Kuna Yala –una de las regiones más violentas y marginadas del país– cuando “le decimos a un joven levántate es porque estamos pensando en un joven que muchas veces esta tirado en la orilla del mundo, por la exclusión social, el desempleo, drogas, estructuras familiares desintegradas, experiencias de dolor que de alguna manera, exponen al joven, lo disminuyen, lo destruyen, le quitan la ilusión de vivir”, dijo el también responsable de la pastoral juvenil de Panamá.
Sin duda, el reto de los obispos panameños será, como bien lo han planteado, tocar corazones y garantizar la participación de la mayoría de jóvenes en situación de exclusión, a partir del postulado de que la juventud hace camino mirando el futuro con esperanza. De este modo, los organizadores de la JMJ Panamá 2019 apostarán, con fidelidad creativa, a la construcción de tiempos nuevos para la Iglesia y la sociedad.