Carlos Escribano pone a La Rioja en salida

  • El obispo de Calahorra-La Calzada Logroño crea la Delegación de Iglesia en salida
  • El prelado quiere poner a la diócesis “en estado de misión permanente”, dice a Vida Nueva
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Carlos Escribano, en un festival juvenil en la Diócesis de Calahorra-La Calzada Logroño

Delegación de Liturgia, para el Clero, de Apostolado Seglar y ahora también de Iglesia en Salida. La Diócesis de Calahorra-La Calzada Logroño se renueva con una delegación ‘made in Francisco’. Interpelado por la situación actual, Carlos Escribano erige esta delegación que guiará la misión de la diócesis los próximos cinco años, pero que no se quedará aquí, puesto que será una delegación de futuro. ‘Id al mundo entero y proclamad el Evangelio’ (Mc 16, 15). Esta es una de las máximas del obispo que, casi dos años después de su llegada a tierras riojanas, comienza a cambiar las estructuras. “Si el Papa está renovando la Curia, nosotros tenemos que hacer lo mismo en las diócesis”, señala a Vida Nueva el delegado diocesano, Javier Martín Martijas.

“Mi objetivo es poner a la diócesis en estado de misión permanente”, dice el prelado en conversación con esta revista. Pero “cuidado con la adjetivación”, puntualiza, porque “corremos el riesgo de llamar misionero a todo lo que hacemos y que, al final, nada de lo que hagamos tenga esa dimensión y sigamos haciendo lo mismo de siempre aunque lo llamemos de otra manera”. A pocos días de que se cumplan cinco años de pontificado, la Iglesia riojana aterriza el documento marco del actual papado –’Evangelii gaudium’– conscientes de que el camino será largo, porque “cuando te tomas en serio la exhortación te das cuenta de todo el trabajo que tienes por delante”, subraya Escribano. Y es que “con el paso del tiempo se demuestra cada vez más rica”, añade.

La misión diocesana se desarrollará en tres escenarios: el de los cristianos a los que hay que ayudar a ser discípulos misioneros, el de los alejados y el de los ausentes. “Hay que pensar estrategias principales para el tercer y el segundo escenario. Nos interesa hacer el diseño de la misión que perdure en el tiempo, siempre con propuestas de encuentro con la sociedad”, explica. Y la mejor forma de llamar a esta nueva estructura es Iglesia en salida: “Es un nombre que recoge la intención con la que creamos este órgano de trabajo y es fácilmente identificable por la gente, pues recoge las palabras de Francisco”, dice Escribano.

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