La Iglesia latinoamericana, a través del Departamento de Justicia y Solidaridad (DEJUSOL) del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y del Secretariado Latinoamericano y del Caribe Cáritas (SELACC), expresaron su consternación ante los ataques con gases tóxicos a Siria, a lo que “se suman los bombardeos de Estados Unidos, Reino Unido y Francia durante la noche del viernes 13 de abril”.
Así lo manifestaron en un comunicado firmado por los obispos presidentes de ambas instituciones, Gustavo Rodríguez Vega, del DEJUSOL-CELAM, y José Luis Aguaje, del SELACC (en la foto, junto con el cardenal Tagle), en el que expresan su solidaridad con “una población ya crucificada por años por una guerra interna con crueldades indecibles, turbios intereses e injusticias”.
Nada justifica el uso de instrumentos de exterminio
Ante la crítica situación de Siria, los organismos latinoamericanos señalaron enfáticamente que “la violencia y la guerra no son la solución a los graves problemas de ese hermoso y atormentado país”, haciendo suyas las palabras pronunciadas por el papa Francisco el pasado 8 de abril, cuando aseveró que “no hay una guerra buena y una mala, y nada, nada puede justificar el uso de tales instrumentos de exterminio contra personas y poblaciones inermes”.
Con un llamado a la oración, la reflexión y la solidaridad por la paz de Siria, el DEJUSOL-CELAM y el SELACC pidieron a toda la comunidad católica de América Latina y el Caribe, a otras comunidades de fe y a los hombres y mujeres de buena voluntad, a mantener su compromiso “con la justicia, la paz, el desarrollo integral de nuestros pueblos y el cuidado de nuestra Madre Tierra”.
De igual forma, exhortaron a la comunidad internacional a que “dejando a un lado los intereses políticos y económicos, se empeñe en construir la paz con justicia, entendiendo que la paz es el camino para la cultura del encuentro”.
Constructores de paz
Esta invitación a ser “constructores de paz” se suma a los clamores expresados por varias conferencias episcopales del continente, como la peruana y la venezolana.
“Que Jesús, vencedor de la muerte y de todas las injusticias, sea nuestra luz en el camino de ser constructores de paz”, finaliza el comunicado del DEJUSOL-CELAM y el SELACC.