El patriarca Béchara Raï intenta frenar la deriva de la polémica y los ataques personales que se han generado alrededor de cuestiones que afectan a la enseñanza de la Iglesia. Un fenómeno que también ha comentado Francisco en ‘Gaudete et exsultate’.
Las luchas intraeclesiales que se desarrollan en internet sobre cuestiones doctrinales son también imparables entre los cristianos de Oriente. Una dinámica que la Iglesia maronita trata ahora de contrarrestar con una iniciativa singular: un manual doctrinal, con instrucciones pastorales, que se dirige no a quienes se acercan al cristianismo por primera vez, sino a todos aquellos -sacerdotes, religiosos y autodenominados expertos- que en los medios de comunicación tradicionales y en las redes sociales están transformando los contenidos de la fe católica en un campo de batalla.
La Iglesia de Togo suspende a tres sacerdotes por no renovar sus promesas sacerdotales
El obispo de la diócesis de Kpalimé, en el sur de Togo, Benoît Alowonou, publicó el viernes 13 de abril tres decretos de suspensión relativos a tres sacerdotes de su presbiterio. Los Padres Daniel Gbadji, Yves-Paul Azaglo y Gerson Gale habían causado un escándalo público en la Misa Crismal del 28 de marzo al negarse a renovar sus promesas sacerdotales.
Los sacerdotes castigados son acusados de haberse comportado de manera “escandalosa” el Miércoles Santo, 28 de marzo, durante la Misa Crismal celebrada en la Catedral del Espíritu Santo en Kpalimé, a 120 km al noroeste de Lomé, capital de Togo. Durante esta celebración, los tres sacerdotes se rebelaron públicamente contra su obispo. Expresaron palabras consideradas “escandalosas” e hicieron un llamamiento a los fieles para que impidieran la celebración de la Misa Crismal. También permanecieron sentados mientras sus hermanos renovaban sus promesas sacerdotales ante el obispo de Kpalimé.
Los obispos de Oceanía se posicionan contra la minería submarina
El trabajo de los obispos de la Federación de las Conferencias Episcopales Católicas de Oceanía (FCBCO) continúa en la Asamblea de los Obispos que se celebra en Port Moresby, capital de Papúa Nueva Guinea, centrados en la encíclica ‘Laudato sí’. En los últimos días ha destacado el diálogo sobre la minería en el fondo marino en la que han participados expertos universitarios así como movimientos de oposición a la minería submarina formados por la población local.
“El problema del nivel del mar es uno de los mayores desafíos en Oceanía. ¿Por qué explotar el océano cuando tenemos recursos en la tierra?“, se preguntaban en la Asamblea que continúa cuestionándose sobre la propiedad de la tierra, las políticas y las actividades de desarrollo para el mar. Del mismo modo que se firmó que “nadie conoce el impacto ambiental que tendrá la explotación marina”, al tiempo que pedían un “plan de gestión de desastres naturales”.