Faltan poco más de dos meses para que México viva la elección más grande en su historia –con 3,400 cargos en disputa– en la que no sólo está en juego la Presidencia de la República, sino también al renovación del poder Legislativo federal, algunas gubernaturas, alcaldías y congresos locales.
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) ha publicado ya el documento “Participar para transformar. Mensaje de los obispos mexicanos con motivo del proceso electoral 2018”, en el que exhorta a los católicos a asumir su responsabilidad como ciudadanos y llama a analizar las propuestas de campaña para evitar la tentación de votar por el mal menor. Ahora da a conocer una oración.
Tras reunirse en días pasados con cuatro de los cinco candidatos a la Presidencia de la República, en el marco de su CV Asamblea Plenaria, con esta plegaria la CEM invita a los mexicanos a unirse en oración ante el proceso electoral:
‘Oración para el proceso electoral 2018,
“Dios Uno y Trino, invocamos tu asistencia amorosa a favor de nuestra nación en este año que ejerceremos nuestra responsabilidad ciudadana como una expresión de compromiso y participación en la construcción de nuestra Patria.
Padre eterno y bondadoso, ayúdanos a discernir con tu sabiduría para elegir a aquellos ciudadanos que puedan ejercer las funciones de gobierno con conocimiento, sensibilidad, competencia, honestidad y que sean constructores de la paz y la reconciliación.
Hijo único del Padre, que te encarnaste y asumiste un contexto histórico, en medio del pueblo de Israel, que tu ejemplo nos comprometa con nuestro propio pueblo para que ofrezcamos nuestra aportación constante en la participación y el compromiso ciudadano.
Espíritu Santo, fuente del amor del Padre y del Hijo, ilumina nuestra mente e inspira nuestros afectos, para que todos los habitantes de México seamos corresponsables y construyamos una nación donde reine el diálogo, la verdad, la justicia y la paz, que nos haga merecedores de la Patria del Cielo.
Todo esto, Dios Uno y Trino, lo suplicamos amparándonos en la intercesión maternal de Santa María de Guadalupe, Madre de todos los mexicanos, por Jesucristo nuestro Señor. Amén.