El estreno de la semana: ‘Bailando la vida’
Tras 40 años de matrimonio, Sandra aguarda la jubilación de su marido para poder cumplir sus sueños, pero un inesperado descubrimiento le obliga a empezar de nuevo en compañía de su hermana. La convivencia entre ambas no será fácil: son muy distintas y han pasado mucho tiempo separadas. Nada que no pueda arreglarse… con unas clases de baile.
Richard Loncraine, responsable de otra historia con veteranos de la vida y del oficio como ‘Ático sin ascensor’, pone en pie una comedia bienintencionada y por momentos previsible sobre segundas oportunidades, con amores y desamores que no entienden de edades. Sin demasiado margen para las sorpresas, pero sobrado de tablas delante y detrás de la cámara.
Sus números musicales –aunque no se inscriba propiamente en el género– y su humor tan británico –que emparenta este trabajo con títulos como ‘Las chicas del calendario’ o las dos entregas de ‘El exótico Hotel Marigold’– componen un cuadro amable, con las dosis justas de dulzura y amargor. Una coreografía que, en manos (y pies) de dos grandes de la escena como Imelda Staunton y Timothy Spall, casi nunca pierde el paso.
Todavía en cartelera: ‘El cuaderno de Sara’
Siguiendo el rastro de su hermana pequeña, desaparecida dos años atrás en la selva del Congo, nuestra protagonista (Belén Rueda) viaja hasta Uganda para adentrarse en el país vecino. Allí, en Kivu Norte, se concentra el 80% de las reservas mundiales de coltán, uno de los “minerales de sangre”, fuente de interminables conflictos en la región y objeto del saqueo internacional.
Sobre este inquietante escenario, el televisivo Norberto López Amado levanta una historia de deudas pendientes y decisiones arriesgadas. Las que conducen a una mujer valiente, pero presa del pánico, a emprender un viaje geográfico y emocional por los infiernos exteriores (señores de la guerra, niños soldado, matanzas indiscriminadas…) e interiores (las relaciones paterno-filiales) que le acechan o salen a su paso.
‘El cuaderno de Sara’ arroja algo de luz sobre quiénes somos, en qué mundo vivimos y en qué medida contribuimos (o no) con nuestra indiferencia (o nuestra solidaridad) a perpetuar (o transformar) su injusta relación de fuerzas. Pero África, con sus sueños (y pesadillas), reclama y merece más corazón y menos retórica.
Ya en DVD: ‘Una razón para vivir’
Un joven inglés, brillante y aventurero, conoce en 1957 a una atractiva mujer con la que se casa al poco tiempo. Pronto viajará con ella a Kenia, donde trabaja en un negocio de importación té. Pero, apenas unos meses después de su llegada, una poliomielitis le deja prácticamente inmóvil y enganchado a un respirador artificial de por vida.
Debut en la dirección del actor Andy Serkis (conocido sobre todo por encarnar a Gollum en ‘El Señor de los Anillos’ y ‘El Hobbit’), este drama británico nos acerca a la historia real de los padres del productor de la cinta, Jonathan Cavendish, y su lucha contra la súbita enfermedad que irrumpió en sus vidas, una actitud que supuso en su momento un verdadero ejemplo a seguir para las personas con discapacidad.
Aunque rodada con indudable gusto y sensibilidad, como corresponde a una relación amorosa de película expuesta a los imprevistos reveses del destino, su indisimulado afán por emocionar a toda costa al espectador nos impide disfrutar como se merece del derroche de fortaleza e ingenio de sus protagonistas para hacer frente a tan devastador giro de los acontecimientos.
