Gabriele Brusco: “Si yo fuera el padre de Alfie tampoco me rendiría nunca”

La Repubblica recoge las declaraciones de Gabriele Brusco, un sacerdote italiano residente en Londres desde hace algunos años que está prestando su apoyo a Alfie Evans y su familia en el hospital de Liverpool donde se encuentran.  Se trata de un representante no oficial del Vaticano dentro del hospital, que, además de la ayuda espiritual, sirve de intermediario entre la familia y el Vaticano y, por tanto, el hospital Bambino Gesù, al que parece que finalmente Alfie no será trasladado. Brusco ha sido enviado allí por el obispo de Carpi, Italia, Francesco Cavina, después de la reunión del padre del pequeño con el papa Francisco

“Hay un clima de fuerte tensión”, reconoce el sacerdote, refiriéndose a la presencia de policía y gente que apoya a la familia en la puerta del hospital. Pero su misión es clara: “Permaneceré al lado de la cama de Alfie en las próximas horas y días, mientras la Santa Sede no me ordene otra cosa. Es lo mínimo que puedo hacer como sacerdote y como hombre”. Tampoco oculta palabras de admiración hacia los padres de Alfie: “Si yo fuera padre como lo es Tom (Evans), también habría hecho todo para salvar a mi hijo sin rendirme nunca, ni siquiera ante la sentencia de un juez que no le permite recibir apoyo de aquellos que quieren ayudar a su hijo al final de la vida”. 

Además, ha expresado el profundo agradecimiento de los padres de Alfie para con Italia, “el único país que ha mostrado verdadera sensibilidad y atención hacia su Alfie“. Por ahora, este sacerdote italiano permanecerá en Liverpool “rezando continuamente por él, haciéndole sentir mi presencia aunque sea solamente poniendo mi mano sobre su frente”, a petición de los padres y del Vaticano.

China se apodera de una iglesia sin registrar

El gobierno chino continúa sus ataques a la iglesia en la provincia de Henan, donde a principios de mes se prohibió la entrada de menores a templos o actividades organizadas por la Iglesia católica. Esta vez ha tomado el control de una iglesia no registrada cuyo párroco sí es parte de la iglesia “oficial”. Según UCA News, el gobierno no permitirá que el templo se abra ni que se registre como iglesia. Sin embargo, una fuente asegura que probablemente el Estado no la confisque indefinidamente, sino que dentro de un tiempo la devolverá a los fieles.

Así, el pasado martes 24 de abril dos oficiales del gobierno acudieron a primera hora de la mañana al templo para sellar sus puertas, impidiendo la entrada de cualquier persona. Un video del momento en el que se ponían los sellos muestra a un anciano católico arrancando los mismos de la puerta y discutiendo con los oficiales, quienes argumentan que es una orden del partido. Por ahora el edificio seguirá confiscado, y el párroco, que al menos no ha sido detenido ni siquiera temporalmente -como ha ocurrido varias veces este año-, ha pedido a los fieles “rezar por la Iglesia reprimida”.

Un sacerdote asesinado en Costa de Marfil

El padre Bernardin Brou Aka Daniel, vicario de una parroquia de Koun Abronso, en la zona este de Costa de Marfil, fue asesinado en la noche del pasado lunes 23 de abril mientras conducía de vuelta a su parroquia después de una reunión en Abengourou, sede de la diócesis a la que pertenece su templo. Iba acompañado por otro sacerdote, el padre Teophile Ahi, cuando se encontraron con un camión parado en mitad de la carretera.

Según relata ACI, al intentar adelantar al camión el sacerdote recibió varios disparos, lo que le obligó a detener el coche. Los atacantes les exigieron dinero pero la respuesta del padre Bernardin, quien les dijo que no llevaban prácticamente nada, hizo que le dispararan una vez más a quemarropa. La llegada de otro vehículo hizo huir a los asesinos y el vicario, a pesar de sus heridas, fue capaz de conducir hasta el hospital de Agnibilékrou, donde pese a la atención de los médicos murió poco después. Es el tercer sacerdote asesinado en el continente africano en apenas una semana.