La Arquidiócesis de Xalapa, Veracruz, se sumó esta semana a las diferentes Iglesias particulares que han expresado la necesidad de que los católicos, como miembros de la sociedad, participen activamente en la jornada electoral del próximo 1 de julio, en la que se elegirá al próximo presidente de México y se disputarán más de 3.400 cargos a nivel federal, estatal y municipal.
A través de un comunicado, la Iglesia que gobierna pastoralmente monseñor Hipólito Reyes Larios, lamentó la serie de abusos y excesos que han convertido la política “en un negocio personal y en una forma descarada e injusta de amasar fortunas personales”, lo que ha creado un desencanto, un malestar social y falta de credibilidad tanto en las instituciones como en quien aspira al servicio público.
Política con un rostro auténtico
No obstante las malas prácticas de algunos políticos, la corrupción y la impunidad que sufre el país –señala el texto–, estamos convencidos de que la vocación política del hombre puede regenerarse y encontrar su auténtica identidad, es decir, la política debe ser entendida como servicio y búsqueda del bien común.
Ante esta realidad, la Iglesia veracruzana hace un llamado a la participación activa en las elecciones de este año, con lo cual se podría comenzar a dignificar la política y devolverle su rostro auténtico. “No podemos improvisar ni dejar la responsabilidad a otros todos debemos salir a votar y ejercer este derecho con el que se tiene una gran responsabilidad para elegir a nuestros gobernantes”, añadió.
La fe no debe reducirse al culto
En línea con la Conferencia del Episcopado Mexicano y algunas provincias y diócesis concretas que han exhortado a la participación activa de sus fieles en el proceso electoral, la Arquidiócesis de Xalapa aseguró también que la fe no puede reducirse sólo al culto, rezos, oraciones o expresiones de piedad, sino que la comunidad cristiana –que es al mismo tiempo parte de la sociedad–, debe proyectar su fe en las distintas responsabilidades como ciudadanos.
Todo cristiano es al mismo tiempo un ciudadano que debe colaborar para construir una mejor nación, y ninguno está exento de participar en todo aquello que abone al bien común, explica el texto firmado por el presbítero José Manuel Suazo Reyes, director de la Oficina de Comunicación Social de la Arquidiócesis de Xalapa.
Tras afirmar que si bien la tarea principal de la Iglesia es la evangelización, la Arquidiócesis pidió no olvidar que, en virtud de su Dimensión Social, todo cristiano está llamado a ser un buen ciudadano que “conoce, colabora y desarrolla instrumentos de construcción de una ciudadanía justa, solidaria, participativa y creativa, y que realice acciones concretas en favor del bien común”.
Los resultados de la participación ciudadana
El comunicado detalla que la participación de los ciudadanos tiene dos efectos fundamentales; por un lado, es legitimadora, y por otro, garantiza el ejercicio democrático. “Para que esta participación tenga realidad hoy –señala– además del sufragio, existen una serie de mecanismos para que la población incida en las decisiones de gobierno de manera independiente, sin necesidad de formar parte de la administración pública o propiamente de un partido político, para participar de la ‘cosa pública’ en un sentido más amplio de la política, de tal manera que la acción del Estado sea en beneficio de la sociedad”.
El texto concluye haciendo un llamado a que ningún fiel católico se quede sin participar en los próximos comicios, haciendo previamente una buena elección de las autoridades mediante un voto razonado; “no hay que dejarse impresionar por discursos fantasiosos e irreales; necesitamos reconstruir la sociedad asumiendo derechos y obligaciones, es decir, iniciando con nosotros mismos, siendo ciudadanos activos y responsables, cristianos congruentes”.