“Cualquiera que insista en la ordenación femenina, incluida la ordenación de diaconisas, ha dejado los fundamentos de la fe católica”. Así se expresa el cardenal Walter Brandmüller. Y va más allá, diciendo que estas personas “cumplen con los elementos de la herejía, cuya consecuencia es la excomunión de la Iglesia”.
Uno de los cuatro cardenales de la dubia contestaba de esta manera a la política alemana Annegret Kramp-Karrenbaue, secretaria general de la Unión Demócrata Cristiana, quien dijo el pasado 10 de mayo en entrevista a Die Zeit que “las mujeres deben tomar posiciones de liderazgo en la Iglesia”, y, aunque esperaba la ordenación de mujeres, un objetivo más realista era el diaconado femenino.
En declaraciones a Die Tagespost, recogidas por The Tablet, el purpurado recalca que la cuestión de las sacerdotisas ha sido autoritariamente excluida por el papa Juan Pablo II. Asimismo, sostiene que la demanda persistente de ordenar mujeres, poner fin al celibato, la intercomunión y la comunión a divorciados vueltos a casar no producirán el efecto que se espera, porque la Iglesia evangélica, “donde todas estas demandas ya se han cumplido”, muestra que “han tenido el efecto de vaciar las iglesias”.
El papa Francisco recibirá a más víctimas de abusos chilenas. Del 1 al 3 de junio, Jorge Mario Bergoglio alojará en Santa Marta a siete sacerdotes y dos laicos abusados por el sacerdote pedófilo Fernando Karadima, como confirmó en la noche de ayer, 22 de mayo, la Oficina de Prensa del Vaticano –y recoge CRUX–. “Con esta nueva reunión, programada hace un mes, el papa Francisco quiere mostrar su cercanía con los sacerdotes abusados, acompañarlos en su dolor y escuchar sus valiosos puntos de vista para mejorar las actuales medidas preventivas y la lucha contra los abusos en la Iglesia”, sostiene la declaración.
“De esta manera concluye esta primera fase de reuniones que el Santo Padre quería tener con las víctimas de la parroquia de El Bosque”, señala el texto. “Estos sacerdotes y laicos representan a todas las víctimas de los abusos cometidos por el clero en Chile, pero no se descarta que puedan ocurrir iniciativas similares en el futuro”, añade el comunicado.
Según el Vaticano, habrá varias reuniones durante el fin de semana, todas ellas tendrán lugar en una atmósfera de “confianza y confidencialidad”. “El Santo Padre continúa pidiendo a los fieles de Chile, y especialmente a los fieles de las parroquias donde estos sacerdotes llevan a cabo su ministerio pastoral, que los acompañen con oración y solidaridad durante estos días”, finaliza el texto.
“En mi corazón no hay lugar para la homofobia”. Son las palabras que el papa Francisco le regaló a Yayo Grassi, un ex alumno del entonces joven jesuita Jorge Mario Bergoglio. Lo hizo cuando le presentó a su pareja durante el viaje papal a Estados Unidos a finales de 2015. Y así lo relató este argentino en entrevista con Vida Nueva. Por eso, no es de extrañar que el chileno Juan Carlos Cruz, una de las víctimas del sacerdote pederasta Fernando Karadima, al confesarle su homosexualidad a Francisco, este le respondiera con un simple “Dios te quiere así”.
Entrevistado en SiriusXM este 22 de mayo, el cardenal Timothy Dolan, arzobispo de Nueva York admitió que lo que le habría dicho el Papa a Juan Carlos Cruz “es bello”: “Jesús habría dicho eso. Esa es la enseñanza conservadora, tradicional, católica ortodoxa. Y el Catecismo insiste en eso”. Pese a que “no dudo de la veracidad de este hombre. Se ve como un joven extraordinariamente sensible y perspicaz; yo diría que es honesto sobre lo que está informando de lo que le dice el Santo Padre”, pero “tengamos en mente que lo tenemos de tercera mano: lo que el Papa le dijo a él y lo que él le dijo a la prensa…”.
Sobre si Dios hace a las personas homosexuales, el purpurado indicó que “esa es un área en la que no creo que el Santo Padre se sentiría competente para hablar. Creo que lo que está diciendo, nuevamente es doctrina católica tradicional ortodoxa: eres hecho a imagen y semejanza de Dios”. Y es que, aunque “cualquier expresión sexual fuera del matrimonio de hombre y mujer es contraria al propósito de Dios”, también lo es “no tratar a cualquiera, incluyendo a una persona gay, con nada menos que dignidad y respeto. Eso está en el Catecismo”.